Se le representa como una diosa alada con una aureola brillante, que porta una antorcha y los rayos de Zeus. Su nombre Proviene del griego “Αστραια” que significa Astraia, también de la palabra “Αστραιη” o “Astraiê” cuyo significado es la estrellada. También se dice que proviene del latín “Astraea” y su significado es relámpago.
Acerca de sus padres se dicen muchas cosas, algunos alegan que era hija de Temis y el poderoso Zeus, y otro sde Astreo y Eos. También se cuenta que era hija de la Prudencia y del Pudor. Dicen que compañía de su madre, eran las representantes de la justicia. Astrea emitía juicios para nada estrictos, simplemente generaban paz, por eso era una de las diosas más buscada cuando descendía del Olimpo.
En la época de oro, los dioses bajaban a la tierra ya que les gustaba interactuar con los hombres dulces, puros y alegres. La Desconfianza acabó con esta época tan dichosa. Llegó la edad de Plata, en donde Zeus había terminado con el mandato de Cronos. Astrea fue fiel aliada de Zeus, portando sus rayos. Los humanos desconfiaron acerca de su futuro, y todo de dejo de ser bello y pacífico. Por su parte Astrea decidió alejarse de las personas, se internó en las montañas; así que todo aquel que deseara sus servicios debía hacer el sacrificio de escalar montañas.
Luego fue precedida por la edad de bronce, aquí los hombres se prepararon y dedicaron al arte de la guerra, entre ellos destacan Heracles, Aquiles, Perseo, Teseo, entre otros héroes y semidioses de renombre. Astrea, al ver esta serie de acontecimientos le pidió al dios Zeus que la dejara regresarse al Monte Olimpo, pues ya no le veía sentido estar en la tierra y mucho menos entre los hombres, a lo cual el poderoso dios accedió.
La recompensa por su lealtad fue el conservar su virginidad y el lugar entre las estrellas como la constelación de Virgo; allí encontró nuevamente la paz que tanto necesitaba. Luego de eso llegó la edad de Hierro, la más difícil para los humanos porque a esas alturas, los Dioses ya no hacían tantas intervenciones, y los humanos todavía guardaban ciertos rencores. En esta era ellos aprendieron a golpes como ser independientes, cuando se sentían bien ni siquiera pensaban en los dioses pero cuando les iba mal, imploraban la presencia de la diosa Astrea para que los aconsejara y pusiera el equilibrio.
Con frecuencia se la confunde, con Dike. Se cuenta también que al final de la Era de los Dioses, ella planto la semilla de cada estrella para la reencarnación de la Familia olímpica, para así cumplir su función en el fin de la nueva era que comenzaba.
Para algunos astrólogos, consideran que la balanza que Astrea llevaba en las manos cuando se convirtió en la constelación de Virgo, en realidad es la constelación de Libra.
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