Herramienta dentro de las prácticas del Ocultismo
Para quienes desconocen su origen y su significado es bueno saber qué hay detrás del yoga. No se trata de una simple sesión de relajación mental y del cuerpo; Se trata de toda una práctica religiosa hindú, introducida en Occidente por masones y ocultistas.
La línea base del yoga como una herramienta dentro de la magia parte de los preceptos de la hermética:
La relación invariable del microcosmos al macrocosmos: el trabajo de la flexibilidad de la relación mente-alma-cuerpo y la apertura que con esto se lleva de la conciencia.
El yoga es una disciplina o práctica milenaria, mística-espiritual hindú (1.800 a.C.). Sus posiciones y ejercicios son inseparables de su cosmovisión; “no hay hinduismo sin yoga, y no hay yoga sin hinduismo”.
Fueron Christopher Isherwood y la Sociedad Teosófica quienes trajeron a Occidente el budismo zen y el yoga del Oriente. No se conocían antes estas creencias ni en América ni en Europa. Los gobiernos estadounidense y británico impulsaron sus planteamientos. La Sociedad Teosófica fue dirigida por masones y ocultistas (Helena P. Blavatsky, Annie Besant, Alice Bailey), que encontraron en la práctica de este una gran herramienta que servía para sus propósitos.
En cualquiera de sus formas, la finalidad del yoga no es únicamente la relajación, la correcta respiración ni el bienestar o control físico (bueno si, pero es inevitable que esta finalidad da como resultados otras cosas), la búsqueda de la “iluminación” como una forma de hablar del despertar de la conciencia (ver aquello que no podemos ver; aquello que esta oculto). El yoga entonces es una “vía de perfección” (de ocho pasos) a través del control de los “elementos físicos y psíquicos” de la persona que pretende el “nirvana” para alcanzar la “iluminación” (apertura del “tercer ojo”) y la “unión con el todo”.
Las ocho etapas:
- iama (‘prohibiciones’):
- ahimsa (‘no violencia’, sensibilidad hacia otros seres).
- satia (‘veracidad’, no mentir).
- asteia (‘no robar’).
- brahmacharia (‘conducta brahmánica’, aunque en la práctica significaba celibato y estudio de los Vedás)
- aparigraja (‘no apegarse’ al hogar, etc.).
- niyama (‘preceptos’):
- saucha (‘limpieza’ física y mental)
- santosha (‘completa satisfacción’).
- tapas (disciplina, ‘consumirse por el calor’).
- swadhiaia (‘recitar [los Vedás en voz baja,] para sí mismo’).
- íswara-pranidhana (‘ofrecerse al Controlador [Dios]’)
- asana (‘postura’): la columna vertebral debe mantenerse erecta y el cuerpo estable en una postura cómoda para la meditación. El hatha yoga se enfoca en este miembro.
- pranaiama (‘control de la respiración’; prana: energía mística presente en el aire respirado; y yama: ‘control’).
- pratiajara (‘poco comer’, control de los sentidos; prati: ‘poco’; ahara: ‘comer; implica el retraimiento de los sentidos de los objetos externos)
- dharana (‘sostenimiento’; dhara: ‘sostener’; implica la concentración de la mente en un pensamiento).
- dhiana (‘meditación’).
- samadhi (‘completa absorción’)
Dicen los yoguis hindúes que los primeros cinco pasos (disciplina moral, purificación corporal y espiritual, posturas gimnásticas-corporales, control respiratorio y desconexión sensorial) son la preparación para alcanzar los grados más altos del “yoga regio” o “raja yoga”. La filosofía del yoga parte del hecho de que si tu cuerpo es sano y elástico, también todos los demás planos: incluyendo la mente.
La “Iluminación”; según los hinduistas se lograría despertando a Shiva (deidad hindú) en forma de serpiente (kundalini), que se dice que vive al final de la espina dorsal, o bien, en los genitales, con objeto de que ascienda desde ese punto por la columna vertebral y vaya “activando” uno a uno los seis o siete chakras (supuestos centros de energía ubicados a lo largo la espina dorsal), y así se una a su esposa Parvati (diosa “energía”) que le espera en la cabeza.
El enlace Shiva-Parvati abriría el “tercer ojo” a nivel psíquico y… ¿físico? Esta es la meta del “yoga kundalini” y de la “meditación dinámica”.
Instructores y difusores de esta disciplina como Ana Paula Domínguez (Directora del Instituto Mexicano del Yoga) confirman que, en efecto, las diferentes posiciones de ese método encarnaban al dios Shiva, a quien solían adorar mediante un símbolo fálico llamado linga, y que “el objetivo era obtener la liberación al fundirse con aquella poderosa deidad”.
La apertura del “tercer ojo” ha sido motivo de interés de los yoguis, swamis y “maestros” orientales, como también de los ocultistas occidentales, pues afirman que con ello se tiene acceso al conocimiento de todo cuanto existe, de toda la realidad, aún de la sobrenatural (por ejemplo, sobre el futuro; haciendo referencia a esto a todas las prácticas que llevan al ocultismo). En todas las tradiciones místicas de todas las culturas del mundo vemos la importancia del simbolismo dentro del 3er ojo y su busqueda: El ojo de Horus, El ojo de Odin, El ojo de Vishnu…
Por ello, para todos los practicantes de magia, incluido Aleister Crowley, y Jon Klimo (el “médium” más famoso de la historia), practicaban y recomendaban ampliamente el yoga.
Todas las formaciones mágicas y ocultistas promueven por esta razón dicha práctica oriental. En el ritual llamado “Paladión” dentro de la Masonería, el segundo paso (de cinco en total) consiste en la “iluminación” o apertura del “tercer ojo”.
Willian Shnoebelen, quien practicó el ritual, afirma que ese ojo (“el Ojo que todo lo ve”) “es el punto de contacto entre los humanos y la gran conciencia, que para los ocultistas son representaciones de Lucifer, Baphomet, El Dios”, y con esto se comienza a “pensar como él piensa y a ver con sus ojos… ”. Recordemos que en los caminos de la magia la relación con el Todo se da de forma individual / personal: y como dijo en su momento Crowley:
Cada hombre es su propio Dios
Los ejercicios respiratorios tienen como finalidad, en la religión hindú, aspirar el prana = la esencia del éter, el Atman-Brâhman, lo divino, la “fuerza vital” (“la energía”). Es el Kundalini Yoga la rama que interesa a los ocultistas y magos de Occidente, pero recordemos que para llegar a este, quizás sería bueno buscar las practicas iniciales que nos armonicen y de esta forma escalar para reforzar nuestros trabajos de la magia; asi como nuestro cuerpo físico y por lo tanto el etérico.
Hatha yoga: Del “ha” (sol, polo positivo) y “tha” (la luna, polo negativo]) Es la base de todo, pues trabaja con el movimiento y la respiración. Es conocido en todo el mundo por sus asanas (o posiciones corporales)
Bhakti yoga: El bhakti es el yoga devocional. La diferencia con el karma yoga es muy sutil: aunque ambos tipos de practicantes dedican sus actividades al Absoluto, a los practicantes de la devoción (bhaktas) les interesa un conocimiento más esotérico de la naturaleza de Dios.
Viniyasa Yoga: Tambien conocido como ashtanga viniysa yoga, enfatiza el viniasa (movimiento sincronizado con la respiración) mediante un método progresivo de series de posturas con una respiración específica (uyáii pranaiama). Funciona como una coreografía. esta práctica produce calor interno y abundante sudoración. Este calor purifica los músculos y los órganos, elimina toxinas y permite que el cuerpo se reconstituya. Este método requiere mucha elasticidad y fuerza muscular, y está recomendado para quienes deseen bajar de peso y aumentar su fuerza y elasticidad.
Yoga nidra: Es el estado de sueño en el que se cae durante la meditación. Según la escritora Anandmurti Gurumaa, el yoga nidra es un estado de conciencia que se sitúa entre la vigilia y el sueño profundo. Es un estado en el que el cuerpo se mantiene relajado y la mente es consciente del mundo interior. El yoga nidra es también conocido como el sueño lúcido utilizado como herramienta de meditación.
Kundalini yoga: incluye asanas (posturas), pranaiama (control de la respiración), canto de mantras, mudrás (gestos rituales) y kriyās (ejercicios). Es un Ashtanga Yoga.
Las posturas son sencillas y, en ocasiones, acompañadas de una respiración dinámica, conocida como «respiración de fuego». No requiere una gran forma física y su práctica genera tranquilidad mental y vitalidad. Trabaja sobre los sistemas osteo-muscular, circulatorio, glandular, nervioso, respiratorio y digestivo.
Kundalini Yoga comprende varios aspectos, entre otros:
- La coordinación entre el movimiento y la respiración.
- Combina posturas estáticas con posturas dinámicas.
- La concentración mental en el movimiento.
- El control del flujo de la respiración durante la práctica.
- La relajación durante y después de cada ejercicio.