Dioses del caballo y diosas del mundo antiguo: celtas, griegos y más
Una de las criaturas más majestuosas y nobles de la naturaleza es el caballo. Las historias de estos hermosos animales se remontan a miles de años. En todo el mundo, las culturas han venerado al caballo por su rapidez, pero también por su poder e independencia. La medicina para caballos es una medicina fuerte. Los celtas y los nativos americanos veneraban al caballo, al igual que los germanos y los nórdicos. Los dioses tenían una fuerte conexión con el caballo. Aquí examinamos los dioses caballos y las diosas caballos del mundo antiguo.
Aine: la diosa del caballo rojo
Aine es una diosa del caballo celta irlandesa y reina de las hadas que curó y otorgó una gran fertilidad a sus seguidores. Su centro de culto estaba en el condado de Limerick, en una colina llamada Cnoc Aine en Knockainey. En la antigüedad, la realeza realizaba matrimonios en la cima de la colina para honrar a Aine y sellar la realeza. El lago sagrado de Aine, Lough Gur, que no está lejos de Cnoc Aine, fue utilizado como un lugar de curación y transición de esta vida a la siguiente.
Habilidades mágicas de Aine
Aine era una diosa de la fertilidad, pero también una diosa de la curación, la soberanía, el otro mundo y la abundancia. Como reina de las hadas, podía cambiar de forma como cualquier otra hada. A menudo se convertía en una gran yegua roja, lo que la convertía en una diosa caballo sagrada para los celtas. El color rojo significaba el otro mundo, el linaje y los misterios ocultos, lo que convierte a Aine en una psicopompa hacia el más allá.
Ares, el dios caballo y sus caballos guerreros
Ares, el dios griego de la guerra, era conocido por sus métodos destructivos. Hijo de Zeus y Hera, Ares era un dios que Zeus mantenía a distancia. Fue venerado como un dios de la guerra, y los griegos desconfiaban de él, ya que tenía la reputación de ser un matador de hombres sin tener en cuenta las consecuencias. Quizás sea más conocido por su escandalosa aventura con la diosa casada del amor Afrodita, en la que fue atrapado en una red de oro por el enojado esposo de Afrodita y humillado frente a los dioses.
El vínculo de Ares con los animales
Después de este evento, Ares se convirtió en un jabalí cuando supo que Afrodita se había enamorado de otro dios: Adonis. Luego cargó contra el chico con todas sus fuerzas. Si bien los animales de Ares incluyen el jabalí, el buitre y el perro, Ares también está estrechamente vinculado al caballo. Ares cargó hacia la batalla en un carro tirado por dos caballos divinos. En su escudo había un emblema de dos poderosos caballos guerreros. Y en algunas partes de Grecia, se hacían sacrificios de caballos en nombre del dios griego de los caballos.
Belenus: el dios del sol brillante
Belenus, también conocido como Belenos, era un dios caballo celta que sobrevivió a la conquista romana y se convirtió en parte de la religión galo-romana. Se le conocía sobre todo como un dios del sol y las ruedas solares eran sagradas para él. Beltane, una antigua fiesta del fuego celta, que se celebra alrededor del primero de mayo, lleva su nombre, ya que fue adorado ese día. Era un dios del sol, y el comienzo de mayo se consideró una vez el comienzo oficial del verano en la época celta. A veces se le representa conducido por un carro tirado por caballos similar a Apolo. Otra conexión entre los caballos y Belenus está en las ofrendas de figurillas de caballos de arcilla encontradas en su santuario en Borgoña, Francia.
Epona: diosa celta de los caballos
El nombre de ninguna deidad evoca la imagen del caballo como el nombre Epona. Epona era una diosa caballo ampliamente venerada de los celtas continentales que vivían en la región que es la actual Francia y Alemania. Su culto sobrevivió a la conquista romana y se convirtió en parte de la religión galo-romana. Se han encontrado esculturas y artefactos que representan a Epona y sus caballos por todo el Imperio Romano. Su nombre significa literalmente “Gran Yegua”. Epona, la diosa del caballo, gobernaba sobre todos los animales equinos, incluidos burros, ponis y mulas. Lo más probable es que fuera una diosa de la fertilidad, ya que se la representa cargando cornucopias, granos y flanqueada por potros.
Macha, la Diosa que conecta con los Caballos.
Macha es una diosa de la mitología celta, parte de la tríada de diosas de la guerra conocida como las Morrígan. Es asociada con la soberanía, la fertilidad y la guerra, y es conocida por su conexión con los caballos. Esta asociación se debe a su vínculo con la tierra y la realeza, ya que los caballos eran considerados animales sagrados en la cultura celta, símbolos de poder, realeza y velocidad. Macha es a menudo representada como una figura poderosa y formidable, que encarna la fuerza y la independencia, cualidades que se reflejan en su relación con los caballos, criaturas que también simbolizan libertad y vigor.
Rhiannon: Reina de las hadas de Gales y diosa del caballo
Rhiannon es una figura mítica galesa de The Mabinogion. Ella es una hermosa doncella de hadas que se casa con un rey galés mortal. Su historia es triste pero inspiradora. Su hijo es secuestrado por un enemigo y se culpa falsamente a Rhiannon por asesinarlo. Ella es castigada con ser despojada de su dignidad y obligada a cargar a cada uno de los invitados del castillo en su espalda como un caballo. Rhiannon nunca huye ni se queja, ya que tiene fe en que se restablecerá su buen carácter. Su historia es de esperanza y fortaleza y empodera a las mujeres que han sido oprimidas o abusadas.
La conexión de Rhiannon con los caballos
Rhiannon es una diosa de las hadas y, por lo tanto, tiene dominio sobre la vida silvestre, pero sus animales favoritos son los pájaros y los caballos. En Mabinogi, Rhiannon es retratada como una yegua y su hijo como un potrillo. Está tan estrechamente relacionada con los caballos que los estudiosos creen que podría ser la versión galesa de la diosa ecuestre continental Epona. El hecho de que lleve a la gente sobre su espalda como un caballo es una evidencia lo suficientemente fuerte como para relacionarla con los caballos. Sin mencionar que cuando su esposo mortal la persigue por primera vez, Rhiannon escapa en su caballo de hadas.
Surya y sus Siete Caballos
Surya es el dios hindú del sol, una de las deidades más importantes en la mitología védica. Es representado como una figura resplandeciente que viaja por el cielo en un carro dorado, tirado por siete caballos, que simbolizan los siete colores del arco iris o los siete días de la semana. Estos caballos son una manifestación de su control sobre el tiempo y el ciclo solar. La conexión de Surya con los caballos resalta su papel como una fuerza vital que impulsa el universo, representando la energía, la luz y la vida que el sol proporciona a la Tierra. Los caballos de Surya son también símbolo de velocidad y poder, reflejando la importancia del sol en mantener el orden cósmico.
Shangó y el caballo negro
Shangó es un dios caballo en la religión Yoruba. Es un Orisha del trueno, la justicia, la virilidad y el fuego (entre otras cosas). En la leyenda, fue el cuarto rey de Oyo, la segunda dinastía de Oduduwa, en el imperio Yoruba en África Occidental. Sus consortes fueron Oshun, Oya y Obba. Era hijo de Oddumare en algunas leyendas, y en otras era el heredero de Obbatala y Oddua. Su número sagrado es el seis, sus colores son el rojo y el blanco, y su día sagrado es el cuatro de diciembre debido a su comparación con Santa Bárbara.
Caballo negro de Shango
Las fuentes dicen colocar una estatua de un caballo negro en el santuario de Shango. Hay esculturas de la temprana Edad Media encontradas en África que representan a Shangó montando un caballo negro. En muchos lugares del África medieval, los caballos eran vistos como figuras poderosas porque eran propiedad de guerreros y realeza. Debido a la realeza de Shango, tiene una estrecha asociación con los caballos, pero también debido a los rituales sagrados.