Normalmente cuando alguien escucha el término satanismo lo relaciona con sacrificios animales, rapto de niños para luego matarlos, asesinatos y cosas que no son muy agradables. Afortunadamente esos prejuicios no se encuentran ni remotamente cercanos a lo que en realidad es el satanismo y su práctica.
El satanismo es una corriente religiosa fundada en la noche de Walpurgis de 1966 por Anton Szandor Lavey, en San Francisco, California. Es una religión que rechaza a los dioses externos, abraza la carnalidad y el individualismo honesto.
Lavey eligió el término “Satán” como un símbolo, usando el término en hebreo que utilizan los cristianos que significa “opositor, adversario”, se eligió esta palabra porque el satanismo es una oposición a las religiones teístas y su inherente hipocresía.
Para el Satanismo, Satan es un mito, como Dios y otras deidades, sin embargo Satanás como símbolo es increiblemente poderoso. Satanás representa la fuerza humana, la exaltación del intelecto, la plena satisfacción fisica, mental y emocional.
El Satanismo es sincero, no hay condenación ni culpa, es hacerte cargo de tus actos y ser responsable, todo esto sin dañar a nadie… a no ser que te dañen a ti primero, en ese caso destrúyelo!
“Si un hombre te abofetea en la mejilla, rompele la otra!. Que ningún ultraje se quede sin castigar,
sé como un león en el combate, se peligroso incluso en la derrota”Anton Szandor Lavey
Lavey siempre se burló de la separación entre brujería “blanca” y “negra”, para él tal cosa no existía, la magia era magia con todas las consecuencias que trae el usarla y los moralismos siempre le resultaron ridículos.
Para Lavey, Satanás era el “villano” que mantenía vigente el negocio de la Iglesia Judeocristiana, quien va a necesitar salvación si no hay mal del que salvarse? A quien le van a echar la culpa de todo lo malo que sucede? Con que les van a meter miedo? Con ideas como el diablo, el infierno y el pecado.
Curiosamente, cuando uno lee la Biblia Satánica que escribió Lavey, uno se da cuenta que no hay nada descabellado ahí e incluso tiene más coherencia que muchas reglas que tienen otras religiones y adora al propio ser individual.
A continuación los mandamientos satánicos que hay que seguir si quieres seguir esta filosofía de vida:
- No des tu opinión o consejo a no ser que te lo pidan.
- No le cuentes tus problemas a otros a no ser que estés seguro que los quieran oír.
- Cuando estés en casa ajena, muestra respeto o mejor retírate de ahi.
- Si un invitado en tu casa te molesta, trátalo con crueldad y sin piedad.
- No hagas avances sexuales a no ser que te hayan dado consentimiento.
- No tomes lo que no es tuyo a no ser que sea una carga para la otra persona y que llore para ser aliviado.
- Reconoce el poder de la magia si la has usado exitosamente para obtener tus deseos, si tu niegas el poder de la magia después de haber tenido éxito, perderás todo lo que hayas obtenido.
- No te metas en asuntos que no tienen que ver contigo
- No lastimes niños
- No mates animales a no ser que seas atacado o que sea para alimentarse
- Cuando estés en territorio abierto, no molestes a nadie. Si alguien te molesta, pídele que pare. Si no lo hace, destrúyelo.
Recordemos una vez más que el Satanismo es una religión individualista, es reconocer el dios dentro de nosotros y trabajar duro para alcanzar nuestros objetivos, defiende la libertad sin restricciones, pero SOLO hasta el punto que las preferencias propias no violen las de otro como pudieron apreciar en los mandamientos que acaban de leer.
El Satanismo recomienda complacerse en cada uno de estos los pecados capitales impuestos por la Iglesia puesto que todos ellos conducen a la satisfacción fÌsica, mental o emocional. Un Satanista sabe que no tiene nada de reprobable el ser codicioso, ya que ello no significa otra cosa que desear más de lo que ya tiene y para ello debe de trabajar duro. La envidia representa considerar favorablemente lo que los otros poseen y aspirar a tener las mismas cosas por uno mismo. La envidia y la codicia son las fuerzas que motivan la ambición y sin ambición no se logra nada verdaderamente importante.
La gula es simplemente comer más de lo que necesitas para mantenerte vivo, cuando has comido en exceso hasta el punto de la obesidad, el pecado del orgullo te motiva a recobrar el aspecto que tenías antes (o hasta mejor). Todo aquel que compra ropa o accesorios con otro fin que no sea cubrir su cuerpo y el de protegerse de los elementos naturales, se hace culpable de orgullo.
El Satanismo ha sido muy malentendido desde su fundación y la mayor cantidad de información allá afuera es errónea (así se hacen los chismes de sacrificios animales y secuestro de niños). Sugiero ampliamente que si es de su interés el conocer más sobre Lavey y el Satanismo lean sus libros publicados para que puedan tener información de primera mano (Que mejor que del fundador de la Iglesia de Satanás).
Libros escritos por Anton Lavey:
- The Satanic Bible (1969)
- The Satanic Rituals (1972)
- The Satanic Witch (1989)
- The Devil’s Notebook (1992)
- Satan Speaks! (1998) (Feral House)