A los signos de Tierra, Tauro, Virgo y Capricornio, les gusta la estabilidad y el trabajo duro para consolidar su situación en la vida, son estables.
El simbolismo de la Tierra está vinculado a la estabilidad, la construcción, la permanencia. Esta es una personalidad práctica y de sentido común, que trabaja sin prisas y continuamente para lograr sus objetivos, sin perder nunca el foco en el objetivo.
Tierra tiende a ser introspectivo, paciente, pasivo y empático, y tiene una relación muy particular con el tiempo. De naturaleza tranquila y fría, los signos de la Tierra son resistentes, dotados de una fuerte fuerza de voluntad y superación. Son “constructores” leales y mantienen su fuerza interior en tiempos difíciles. A diferencia de la personalidad del Elemento Fuego, la Tierra crea pacientemente los cimientos para luego construir y mantener su crecimiento.
La Tierra es el Elemento más preocupado por la seguridad y el más práctico de todos. Del caos, crea forma; tiene vocación de dar forma a la materia. Su energía se centra en satisfacer las necesidades básicas: seguridad, alimentación y calor. La Tierra en equilibrio es tolerante, paciente, eficiente, constante y realista. La falta de este elemento sugiere una personalidad cargada de sus propias emociones, con energía dispersa e inestable.
Dada su naturaleza, las personalidades de la Tierra deben establecerse, echar raíces, sentir la seguridad de sus pies bien enterrados en el suelo. Esta es la base sobre la cual consolidan todas sus posibilidades de desarrollo material y personal. La tierra es riqueza, abundancia y paciencia. Son personas sensoriales, que sienten al tacto. Valoran la proximidad física, el contacto con el entorno y las personas, más que la conexión en el plano mental.
También son personas prácticas, que manejan extremadamente bien el plan material y que trabajan duro para obtener recursos que les brinden la seguridad que desean. Como tal, los nativos de este elemento no son expertos en el cambio. La Tierra firma el orden de valores e intenta seguir los estándares establecidos, sin correr demasiados riesgos.
Debido a una postura altamente objetiva, el plan de creatividad puede verse comprometido, sin espacio para ideas locas. A pesar de ser personas tolerantes y pacientes, la terquedad y la inercia los hacen nativos de ideas fijas e instigarlos hasta sus límites puede provocar reacciones desagradables.
En exceso en la carta astral, la influencia del Elemento Tierra puede conducir a la sobrevaloración de los bienes materiales, como un medio esencial para la sensación de seguridad. No es solo el deseo de tener más dinero, sino todo lo que involucra lo físico, como la sexualidad o el estatus social. También puede aumentar la tendencia al pesimismo, la cristalización de hábitos y comportamientos, el establecimiento de una rutina, el estancamiento, la necesidad de hacer siempre lo mismo.
Los cambios importantes en la rutina diaria, la imprevisibilidad de los eventos o los simples contratiempos, pueden convertirse en ansiedad, generada por la sensación de falta de control y la sensación de inseguridad. La Tierra necesita previsibilidad, saber lo que cuenta, sentir que está a cargo de su vida.
Por otro lado, la ausencia del Elemento Tierra en la carta natal puede revelarse en la negativa a permanecer, en la imposibilidad de resistir la llamada al cambio. Esto puede reflejarse, por ejemplo, en la dificultad para construir una carrera sólida, ya que la persona no tiene la paciencia necesaria para construir las bases y esperar los resultados. Incapaz de esperar la madurez profesional, salta rápidamente a una nueva empresa o se siente poco reconocido en su papel (esta también es una de las características asociadas con el exceso de fuego en su personalidad).
En la esfera amorosa, los nativos de este Elemento son demasiado pragmáticos y prácticos para impresionarse solo con palabras y promesas. Su principal interés radica en la seguridad, estabilidad y consistencia de las cosas.
Temperamento de los signos de Tierra
El elemento Tierra es práctico y pragmático con un sentido de la realidad que se atiene a valores que han sido establecidos y probados. Su mundo se configura en base a las sensaciones que tiene a través de sus sentidos.
Una búsqueda de seguridad se da en este temperamento. Un énfasis en este elemento hace que valore a las personas que en el mundo han “triunfado”, aunque no necesariamente por la acumulación material que han hecho, sino que puede ser también por cómo han contribuido en el mundo.
Se basa en hechos probados y la visión que tiene del mundo es estructurada, tiene espíritu científico, la mente puede ser calculadora y los hechos son importantes para ellos, un motivo más por los que pueden ser tachados de ser fríos emocionalmente.
Es paciente, perseverante, el tiempo pasa a ser un aliado para él.
Responsabilidad es una palabra que valora, se puede ser responsable de manera innata o desarrollar el sentido de la responsabilidad será un trabajo en la vida.
El elemento Tierra en la Astrología significa sustancia y practicidad, siendo la fuerza impulsora de los signos de Tauro, Virgo y Capricornio.
Tauro: Este signo emprende una búsqueda constante de los placeres proporcionados por el espectro material y terreno. Para Tauro, lo importante son las ganancias y las ventajas que la Tierra y la naturaleza le proporcionan. Como signo Fijo, Tauro busca estabilidad y valores personales.
Virgo: De naturaleza detallista, este signo busca la perfección incansablemente y puede ser muy crítico, sistemático y a veces monótono. Para el Virgo Mutable, es la seguridad generada por la rutina y los hábitos lo que lo mantiene en movimiento.
Capricornio: Este signo tiene una sabiduría que proviene principalmente de la experiencia. Naturalmente terco, rígido y pesimista, para el Cardinal Capricornio, su prioridad es alcanzar límites con estabilidad, seguridad y determinación.
Relaciones de los signos de Tierra
* Tierra-Agua:
Se complementan en su naturaleza básica, ambos parten de una misma base, su naturaleza es femenina lo que les aporta un carácter receptivo, ambos elementos tienen en común que reaccionan a las circunstancias. Tierra estimula a las de Agua porque a su naturaleza emocional aporta una visión más real y práctica, a la hora de ubicarse o desenvolverse en el mundo, digamos que el agua se puede contener en algo con forma. El Agua aportará su imaginación, su ensoñación, ensimismamiento o profundidad e influenciará en la Tierra haciendo que sean menos estructurados y más conscientes de las emociones. Seguridad y misterio tiene que coexistir en la relación tierra-agua.
* Tierra-Aire:
la combinación de estos dos elementos en una relación no la hace que sea fácil, ya que sus principios son diferentes, la Tierra cuyo sentido de la realidad es fruto de sus percepciones que tiene a través de sus sentidos, se encuentra con el elemento pensante y racional del Aire. El mundo de las ideas a los signos de tierra no les importa mucho aunque de ellos pueden aprender a reflexionar y a ser más flexibles, pueden tener a través de los ojos de aire una conciencia más inclusiva del mundo y menos limitada. Aire relaciona unos con otros. La imagen de un torbellino, levantando el mundo de la forma cuando el aire es dominante o la imagen del cortavientos, la forma que frena el aire nos configuran imágenes de la cierta dificultad de relación entre estos dos elementos, pero podemos encontrar el grácil movimiento de las formas más “elásticas” cuando el viento sopla con suavidad.
* Tierra-Fuego:
entre ellos hay una cierta complementación aunque sea a través del conflicto, existe una atracción seguramente inconsciente, lo que les lleva a relacionarse pero no verse puntos compatibles. Si Tierra necesita pruebas fuego no se la va a proporcionar, su naturaleza no es esa, ni tan siquiera el fuego intentará dar muchas explicaciones, pero muchas veces la Tierra se quedará con los ojos abiertos, estupefacta, al ver como la personalidad de Fuego encuentra lo que ella tanto y tanto ha buscado, fuego seguramente ni prestará la más mínima atención, ni lo valora, sencillamente porque es diferente a la tierra. Por eso, Fuego le recuerda a la Tierra en confiar en su intuición. Tierra aportará esa practicidad, sabrá concretar esa visión que puede tener el Fuego en la relación y enseñará al Fuego a estar más con los pies en este mundo, dándole más cautela y menos arrogancia. La imagen de la tierra desértica, agrietada acompaña a estos dos elementos en relación y la arcilla cocida como representación de la concreción de la forma en combinación con el fuego.
* Tierra-Tierra:
compartir el mismo elemento denota complementación entre dos personas, es estimulante para ambos en general, la relación en el mismo elemento hace que entre ellos se ayuden y vean el mundo de una manera similar, aunque denotan una cierta dinámica de monotonía. Cuando el signo solar se repite entre ellas, sí que puede ser un estímulo, pero también se da una falta de amplitud en la relación, su mundo es demasiado “su mundo” y puede existir una falta de perspectiva entre ambos. En Tierra el apoyo se verá en la visión práctica, en el desenvolvimiento en el mundo, en la previsión, y en cómo establecerse. Ambos persiguen la seguridad como base de acción.