Círculo de aprendizaje para practicantes de Ocultismo ~ Magia ~ Hechicería ~ Brujería ~ Herbolaria ~ Runas ~ Tarot ~ Astrología ~ Numerología ~ Tradiciones Neopaganas y Tradiciones Mágicas ~ Sabats ~ Esbats ~ Esoterismo ~ Brujería Tradicional del Cerco en la Ciudad de México desde 2016
Nombres: Theophrastus Bombastus von Hohenheim, Theophrastus Phillippus Aureolus Bombastus von Hohenheim, Paracelso (de ‘para’ que es similar a ‘celso’ Celso quién fue un médico muy celebre: Aulus Cornelius Celsus)
Fue hijo único del matrimonio Elsa Oschner y Wilhelm von Hohenheim. Nació 10 de noviembre de 1493 en Zúrich, Einsiedeln, Suiza. Se dice que le dieron el nombre de Teofrasto, en honor al pensador griego Teofrasto Tyrtamos de Ereso, un físico especialista en las propiedades medicinales de las plantas y de los minerales.
Durante su infancia, Theophrastus era de estatura baja con tendencia
al raquitismo, su padre el alquimista y Dr. Hohenheim creía firmemente en los
efectos saludables que proporcionaba el aire fresco así que cuando Theophrastus
creció éste lo hizo su compañero; así consiguió mejorar su cuerpo y espíritu.
Es en estas salidas con su padre que Theophrastus comenzó a aprender y conocer las
diferentes hierbas y plantas, además de las diferentes formas de utilizarlas. Aprendió
sus primeras lecciones de latín, medicina, teología, botánica, alquimia gracias
al Dr. Hohenheim, su padre.
Desde muy joven fue enviado a estudiar a la famosa Escuela
Benedictina del Monasterio de San Andrés para comenzar su instrucción religiosa.
En 1507, Paracelso viajo, como muchos jóvenes, por Europa en busca de maestros famosos e iban de una universidad tras otra. Debido a esto se dice que Paracelso asistió a las universidades de Basilea, Tübingen, Viena (se dice que se graduó de ésta universidad), Wittenberg, Leipzig, Heidelberg y Colonia durante los cinco años siguientes, pero se sintió decepcionado con todas.
Luego fue a la Universidad de Ferrara en Italia, donde recibió un doctorado en 1516, y en esta época es donde se supone que también comenzó a usar el nombre “para-Celsus”
Durante este tiempo aprendió, además de medicina, sobre ocultismo y astrología. En ese entonces la magia y el misticismo coexistían con las teorías más antagónicas, Paracelso por su parte se esforzó por adquirir el misticismo que unía el alma con el Espíritu Divino para así comprender cómo es que el Espíritu Universal funciona dentro de la Naturaleza.
Paracelso pronto se dio cuenta de que lo que él buscaba no lo encontraría con la ciencia oficial; quería encontrar la verdad, el orden y el experimento científico. Manifestó haber leído, en la biblioteca de su padre, las obras del abate Tritemio o Tritemius quién era considerado un gran sabio mago así que decidido a ser su discípulo se puso en marcha hacia Würzkurg donde éste se encontraba.
Tiempo después cuando consiguió formar parte de los discípulos del sabio Tritemio, se adentro a las ciencias ocultas, al estudio de la Biblia. Lo anterior debido a que el abate era un gran conocedor de Cábala y había dado profundas interpretaciones de los pasajes proféticos y místicos de la Biblia, y según sus enseñanzas sus alumnos debían dedicarle toda su atención.
Su padre, el Dr. Hohenheim, le convence de que no existe nada como la experiencia para aprender así que, siguiendo este consejo, Teofrasto trabajo en los talleres minerales y metalúrgicos de las minas. Aquí aprendió todo sobre los minerales, a identificarlos, obtenerlos y sobre los efectos que provocan los ácidos minerales.
Cuando llego a conocer los misterios de mundo visible e invisible, se dice que Paracelso aborreció la Nigromancia porque estaba convencido de que con ella sólo se atraían fuerzas maléficas y que era practicada por hombres poco escrupulosos. Renuncio a toda ganancia personal que proviniera del ejercicio de la Magia. De aquí es donde le nació el interés por el estudio de magia divina, su anhelo era “curar a los hombres” e hizo remedios con la ayuda de los minerales.
Paracelso consideraba que toda sustancia dotada de la vida orgánica, aunque aparentemente inerte, contenía gran variedad de potencia curativa. Para él, la medicina tenía cuatro pilares: astronomía, ciencias naturales, química y el amor.
Fue el primero en hacer uso del láudano (labdanum), una tintura preparada para reducir todo tipo de dolores desde el provocado por los dientes hasta aquellos que se producen por enfermedades terminales como el cáncer.
Participó en las “guerras holandesas” como cirujano del ejército e introdujo por primera vez el eléboro negro a la farmacología europea y recetó la dosis correcta para aliviar algunas formas de arteriosclerosis.
En 1524, Paracelso regresó a Villach y descubrió que era conocido por todos por sus famosas curas milagrosas. Posteriormente fue nombrado médico de la ciudad y profesor de medicina en la Universidad de Basilea en Suiza. Estudiantes de todas partes de Europa fueron a la ciudad para escuchar sus conferencias. Pronto esto le traería muchos enemigos porque no solo despreciaba las obras de Galeno y Avicena, sino que mostraba total falta de respeto por la tradición actual, como cuando el día de san Juan de 1527 unos estudiantes necesitaban combustible para la hoguera y Paracelso no dudó en arrojar a ella una copia del Canon de Avicena.
En 1530, Paracelso escribió una descripción clínica de la sífilis, introdujo el término sinovial, para referirse al líquido que lubrica las articulaciones; asoció los temperamentos galénicos a los sabores fundamentales: dulce (tranquilo/flemático), amargo (colérico), salado (sanguíneo), ácido (melancólico).
Además él fue quien dijo por primera vez que los cuatro elementos, agua, tierra, aire y fuego, pertenecían a criaturas fantásticas que existieron antes del mundo. Sostenía que los gnomos se asociaban a la tierra, las nereidas con el agua, las salamandras con el fuego y los silfos con el aire.
Como parte de su trabajo, vinculo tres sustancias (la
tria prima) con las tres órdenes que componían al ser humano: la sal al
cuerpo, el azufre encarnaba el alma y al mercurio le correspondía el espíritu. Decía
que al comprender la química de la tria prima se podrían descubrir los
medios para curar las enfermedades.
Extendió la definición de alquimia a cualquier proceso a través del cual las sustancias se convierten en algo nuevo, en ese sentido el panadero sería un alquimista cuando cuece el pan, el tejedor cuando hace la tela, etc.
También fue el primero en declarar que, si se administra en pequeñas dosis, “lo que enferma a un hombre también lo cura”, un pensamiento anticipado para la practica de la homeopatía.
Se dice que Paracelso logró alcanzar la Piedra Filosofal
transmutando el plomo en oro, usando métodos alquímicos sólo para comprobar si aquella
transmutación magnifica en verdad era cierta.
Sus nuevos métodos fueron muy controvertidos, por lo que en 1538 fue exiliado de Basilea. Se dice que en agosto de 1540 fue requerido por el príncipe arzobispo Ernst von Bayern y se mudó a Salzburgo, Austria donde permaneció por poco tiempo ya que murió el 24 de septiembre de 1541. Las causas que le llevaron a una muerte tan prematura son varias e inciertas, algunos dicen que murió de cáncer, otros de atrofia renal, envenenado o arrojado desde lo alto por sus enemigos, otros más que murió de una intoxicación etílica. Pero, la más aceptada es que murió en una posada y que ante un notario y seis testigos expreso su ultima voluntad: dejo todo lo que tenía a la gente pobre y pidió que fuese enterrado en la iglesia de San Sebastián.
Después de su muerte, el movimiento delparacelsianismo
fue aprovechado por muchos, se basó en el principio de mantener la armonía
entre el microcosmos, el hombre; y macrocosmos, naturaleza.
Resultaría muy extenso enumerar todas las obras que escribió Paracelso, sin embargo, podemos decir que escribió sobre Medicina, Astronomía, Filosofía, Religión, Farmacopea, Botánica, Nigromancia.
Conocido por muchos como el <<padre de la toxicología>>, Theophrastus Phillippus Aureolus Bombastus von Hohenheim, adelantado en su tiempo, nos ha dejado un gran legado.
Seth es el dios egipcio de la guerra, el desierto y del caos. Deidad de la fuerza bruta, las tinieblas y las tormentas.
Seth o Set es un dios ctónico, deidad de la fuerza bruta, de lo tumultuoso, lo incontenible. Señor del caos, dios de la sequía y del desierto en la mitología egipcia. También es el hermano de Osiris.
Su nombre egipcio es Suty o Sutej (Setesh, Seteh), y el griego, Set (Seth). La deidad griega asociada fue Tifón.
Seth fue hermano del dios de la muerte, llamado Osiris. Osiris se casó con Isis, y se cree que fueron los primeros gobernantes egipcios. Según Manetón, reinó 29 años durante el período Protodinástico de Egipto. En la mitología egipcia se dice que cuando Osiris fue asesinado por su hermano Seth, su esposa Isis lo revivió convirtiéndolo en el dios de la muerte (ya que fue el primer hombre que descendió al inframundo y revivió), pasando a ser Isis la diosa de la maternidad, el matrimonio y la salud.
La
personificación de la sequía. Como señor del desierto y por tanto la sequía,
Seth se oponía a todo lo que daba vida. Los egipcios también lo vieron como la
tormenta y un dios de la guerra, pero no fue así siempre. Al principio, los egipcios vieron a Seth como
un dios beneficioso. Ellos creían que él vivía en el reino de los muertos
bendecidos, los egipcios oraban a
Seth para que ayudara a los miembros
fallecidos de su familia.
Los
sacerdotes de Horus entraron en conflicto con los seguidores de Seth. Los
estudiosos creen que los seguidores de Horus subyugaron a Seth, al punto de
transformar el rol del Dios en el Panteón egipcio. Convirtiéndolo en el polo
opuesto de Horus.
¿Pero quién
es Seth? Cuál es su origen?
Padre : Geb , el dios de la tierra.
Madre : Nut , la diosa del cielo.
Hermano : Osiris , dios del inframundo, vegetación y fertilidad.
Hermana : Isis , diosa de la magia, el matrimonio y la sabiduría.
Hermana / consorte : Neftis, diosa de la oscuridad y la decadencia
Hermano : Haroeris (Horus el Viejo), un dios del cielo.
Sobrino : Horus el Joven, dios del sol y dios patrón del faraón.
Sobrino / Hijo : Anubis , dios de los muertos y funerales.
Consortes : Anat y Astarte.
Los egipcios veían a Set como el dios de la oscuridad y el caos.
Seth se convirtió en el dios de los impuros y en un oponente de varios dioses. Le
es atribuido el aspecto negativo por la acción desplegada al ver que su padre
al repartir la herencia, le entrega el desierto y a su hermano Osiris, la fertilidad
de Egipto, allí el motivado por la envidia asesina a su hermano y es por ello que Horus (su sobrino), le
destierra al desierto.
Los egipcios usualmente representaban a Seth como un hombre
con la cabeza de un animal fantástico. Tenía un hocico puntiagudo, orejas altas
y rectangulares y un delgado cuerpo canino con una larga cola bifurcada. El cuerpo
de Seth tenía mechones de piel en forma de flechas invertidas.
Imágenes donde se representaba a Seth lo muestran sosteniendo un ankh en una
mano y
un bastón en la otra; un bastón largo con una parte inferior bifurcada y
la cabeza de Seth en la parte superior. Los egipcios también asociaron a Seth
con diferentes animales y, a veces, se lo describió como uno de ellos.
Algunas veces veían en él a un asno salvaje y rojo. Otras lo
confundían con un misterioso animal que según creían vivía en los confines del
desierto. Incluso llegaron a verle como el «cerdo negro» que se comió el ojo de
Horus siendo éste posiblemente el origen de toda aversión que sobre este animal
tendrá religiones posteriores.
El conflicto de Horus el Joven con Seth depende del papel de
Horus como vengador. Seth quería el trono de los dioses, que pertenecía a su
hermano, Osiris. Esto fue antes del nacimiento de Horus, quien, en este mito,
era el hijo de Osiris e Isis. Seth asesinó a Osiris para ganar su trono.
El método de este asesinato varía según la fuente. Un mito dice que Seth ahogó a Osiris. Las otro
comienzan con Seth construyendo un sarcófago que se ajusta exactamente a
Osiris. Entonces Seth engañó a su hermano para que entrara al sarcófago, selló el ataúd y lo arrojó al Nilo. Isis
recuperó el cuerpo de Osiris, pero Seth la detuvo antes de que pudiera
devolverle la vida a su esposo. Seth luego cortó el cuerpo de Osiris y extendió
las piezas por todo Egipto.
Isis y Neftis recuperaron todas las piezas del cuerpo de
Osiris, excepto una que comió un pez. Isis logró traer a Osiris de regreso por
una noche durante la cual ella concibió a Horus y lo de Seth mientras él crecía
hasta la edad adulta. Seth intentó matar a Horus cuando era un niño, pero los
intentos fracasaron.
Cuando Horus creció, luchó contra Seth para vengar a su
padre. El conflicto duró décadas. Finalmente, Seth se convirtió en un
hipopótamo y trató de destruir el barco de Horus. Horus atacó a Seth, pero los
otros dioses le impidieron destruir a su tío y así fue como Horus vengó el
asesinato de Osiris y ganó el trono de los dioses.
Para entender un poco mejor esta rivalidad, podemos revisar el mito de seth.
El Mito de Seth
«Geb, la
tierra, y Nut, el cielo, estaban separados por su padre Shu, el aire. Y esto
ocurre durante 360 días.
Gracias a un
juego, el dios Thot, consigue ganar cinco días, durante los cuales Geb y Nut
logran unirse, engendrar y dar a luz cuatro hijos: Osiris, Seth, Isis y Neftis,
que nacieron por este mismo orden.
Osiris, que
se casó con Isis, desde el comienzo de su reinado se preocupó de apartar a los
egipcios de la vida salvaje, haciéndoles conocer los frutos de la tierra,
dándoles leyes y enseñándoles a respetar a los dioses. Más tarde, viajó por
toda la tierra llevando la civilización. En su ausencia, Seth, no se atrevió a
modificar nada pues Isis mantenía una estricta vigilancia y conservaba todos
los asuntos de su marido en buen orden. Pero al regreso de Osiris, Seth junto a
sus cómplices, le tendió una emboscada: tomó en secreto el largo del cuerpo de
este y mandó construir un espléndido sarcófago que mandó que llevase a la
fiesta que en honor a Osiris se iba a celebrar. A la vista del sarcófago todos
los invitados quedaron atónitos y Seth prometió que se lo regalaría al que allí
se acostase y le viniese justo. Los invitados entonces lo probaron uno a uno,
pero ninguno lo encontró apropiado a su medida. Finalmente, se metió Osiris y
los encontró justo a su talla.
En este
mismo instante, Seth y sus cómplices, se abalanzaron sobre el sarcófago para
ponerle la tapa y, mientras unos aseguraban los clavos, otros se ocuparon de
sellarlo con plomo derretido.
Terminada la
operación, llevaron el sarcófago hasta el río y lo lanzaron. Éste fue
arrastrado por la corriente y salió al mar por el brazo tanítico. Todo esto
ocurrió el día 17 del mes Hat-hor, en el año 28 del reinado de Osiris.
La diosa
Isis, deambuló por todas partes, presa de una gran angustia, y a quien hallaba
le preguntaba si había visto el sarcófago. Encontró a unos niños que le
indicaron el brazo del río por el que los amigos de Seth habían hecho llegar el
féretro hasta el mar.
A
continuación, supo Isis que Osiris, en un arranque de pasión, y en un instante
de confusión, tuvo contacto carnal con Neftis, a quien equivocadamente tomó por
Isis. Ésta, había dado a luz a un niño que abandonó por temor a Seth. Isis lo
encontró, cuidó y el niño, Anubis, se convirtió en su acompañante y guardián.
Tiempo más
tarde, Isis recibió la noticia de que el sarcófago había sido arrastrado por el
mar hasta la ciudad de Biblos, donde las olas lo habían depositado al pie de un
sicómoro.
Este árbol
encerró en su interior el sarcófago y creció a su alrededor. El rey del país,
asombrado por el extraordinario desarrollo del árbol, dio orden de cortar el
tronco que contenía el féretro oculto, y de hacer con él una columna que
sostuviese el techo de su palacio.
Isis,
avisada de este hecho por un viento divino, se trasladó a Biblos. Se sentó al
lado de una fuente abatida y llorosa, y no dirigió a nadie la palabra. Pero
cuando pasaron las servidoras de la reina, las saludó, conversó con ellas e
impregnó sus cuerpos con el aroma sorprendente que se desprendía de su propia
persona.
Cuando la
reina volvió a ver a sus servidoras, sintió deseos de conocer a la extranjera,
gracias a la cual sus cabellos y cuerpos esparcían un aroma de ambrosia. Les
mandó buscarla e hizo de ella su amiga más íntima.
También se
cuenta que a veces Isis se convertía en golondrina, y así volaba gimiendo en
torno a la columna que sostenía el techo del palacio.
Todo esto
duró hasta que un día la reina se puso a espiar a la diosa. Entonces Isis se
mostró en su aspecto divino, y reclamó la columna que sostenía el techo. La abrió
y dejó las maderas al cuidado del rey y la reina, quedando depositadas en el
templo y siendo objeto de veneración.
Subió el
féretro a un navío y retornó a Egipto.
En el primer
lugar solitario que encontró, y en el momento que se creyó absolutamente sola,
abrió Isis el féretro y arrimó su rostro al de Osiris, abrazándolo y
llorándolo. Después depositó el sarcófago que contenía a Osiris en un lugar
apartado.
Pero una
noche, Seth, que había salido a cazar aprovechando un claro de luna, lo
encontró y reconoció su cuerpo, lo dividió en 14 partes y las dispersó por
todos lados.
Enterada de
lo que había pasado, Isis, comenzó a buscarlas, se subió a una barca hecha de
papiros y recorrió el río: en cada lugar donde descubría una parte del cadáver,
mandaba erigir un sepulcro.
La única
parte del cuerpo de Osiris que Isis no llegó a encontrar fue el miembro viril.
Inmediatamente
después de haberlo arrancado, Seth lo había arrojado al río y los peces se la
habían comido.
En lugar de
este miembro, Isis fabricó una imitación, y así consagró la diosa el falo.
Ayudada por
Anubis, recompuso el cuerpo de Osiris y, con su magia, Isis volvió a la vida a
su esposo, pero no a la vida de los mortales, sino como rey de los muertos.
Entonces
Isis mantuvo con Osiris contacto carnal y engendraron a Horus. Osiris, regresó
al mundo de los muertos pero adiestró a Horus para la guerra y el combate, a
fin de que vengara a sus padres y recuperase el trono de Egipto.
Cuando
estuvo suficientemente preparado para la guerra, libró una gran batalla contra
su tío Seth.
Cada uno
pretendía más de lo que el otro estaba dispuesto a ceder. Entonces se atacaron
y lucharon entre sí. Arrojaron sus armas y pelearon a puño limpio. Fue así que
Seth arrancó un ojo a Horus. Pero Horus en su inmenso dolor le pulverizó los
testículos. Se debilitaron y cayeron al suelo. Por causa de esta disputa, sus
países amenazaban morir de hambre y destruirse.
Seth levantó
un proceso contra Horus en la asamblea de los dioses, acusándole de ser un
bastardo y cuestionando por tanto su legitimidad en el trono de Egipto.
Con ayuda de
Thot, Horus ganó el proceso y fue considerado legítimo ante los dioses.
Pero Seth no
se conformaba con su suerte, y como vio que Ra le era favorable y confiando en
su invencible fuerza, se empeñó en sostener otro combate con Horus.
Esta vez
construyeron dos barcas de piedra, pero la de Horus era de madera forrada de
estuco, por lo que cuando llegó la hora del combate, la barca de Seth se hundió
rápidamente. Seth, transformándose en hipopótamo, volcó la de Horus. Pero los
dioses impidieron que Horus matara a Seth con su arpón.
Entonces
tomó partido Osiris a favor de su hijo, diciendo que él era el dios de la
fertilidad.
Ra contestó
que sin él nada crecía en la tierra.
Pero Osiris
hizo ver a los dioses que él era el dios de la vida y de la muerte y que podía
destruir el mundo si quería.
A la
asamblea de dioses no le quedó más remedio que reconocer a Horus como el único
rey de Egipto por toda la eternidad.
Seth, por el
contrario, fue incluido en el séquito de Ra, diciéndole:
“¡Ponte
de pie, oh Seth, bien amado de Ra!
¡Permanece
en tu lugar en la nave de Ra!
Él ha
recibido su corazón como justificación.
Tú derrotas
a los enemigos de Ra todos los días”.
De este mito también podemos notar la relación que Seth y Ra
tenían, Ra exalto las bondades de Seth, lo hizo ver como el dios de la guerra y
el protector que siempre lo libraba de los ataques de Apofis en el desierto,
gracias a las tormentas de arena protegió y salvo la vida de muchos seguidores
de Ra. En otros mitos se dice que Seth y A pofis la serpiente eran una sola
entidad, y que luchaba con RA cada noche, siendo derrotado cada mañana.
Los faraones respetaban a Seth y su poder. Seth fue uno de
los Dos Señores (Horus fue el otro) que le dio al faraón poder y autoridad. Algunos faraones, como
Seti I , fueron nombrados por Seth. Otros faraones utilizaron a Seth como parte
de su emblema.
Dos festivales importantes se asociaron con Seth. Uno de
ellos fue uno de los cinco días intercalarios, los días anteriores al comienzo
del Año Nuevo. Estos fueron los días en que nacieron los cinco dioses osirianos
(Osiris, Horus, Seth, Isis y Neftis). Los egipcios honraron a cada uno de ellos
en su cumpleaños.
Un dios complejo y necesario para crear la dualidad que dio
vida a Egipto y su cosmogonía.
Se representaba como una mujer muy hermosa, de cabellos dorados y con una clara figura protectora y maternal. Es por este motivo que presentaba el arquetipo de la madre así como el instinto maternal.
Deméter fue una de las más grandes deidades griegas. Ella
era la hija de los Titanes, Rhea y Cronos, y la hermana de Hera, Hades, Hestia,
Poseidón y Zeus, los dioses olímpicos. Se había predicho que Cronos sería
depuesto por uno de sus hijos y para evitar esto, se los tragó a cada uno
cuando nacieron.
Sin embargo, Rhea
descontenta con esto, cuando nació su último hijo, Zeus, envolvió una
gran piedra en las mantas y se la dio a Cronos, quien se la tragó. Rhea llevó a
Zeus a Creta, antes de que Cronos se diera cuenta. Cuando Zeus creció, de
alguna manera Rhea persuadió a Cronos a tragar un emético y regurgitó a todos
los niños, quienes luego lucharon contra los Titanes y eventualmente ganaron.
Zeus se convirtió en rey del olimpo.
Deméter era la diosa
de la fertilidad de la tierra y su cosecha, también presidía el ciclo de la
vida y la muerte y la ley sagrada. Se puede decir que los mayores dones que
esta diosa daba a los griegos eran el grano y los misterios eleusinos, que les
otorgaban mayores esperanzas en esta vida y en la otra.
El culto de
Deméter conllevaba temas como la muerte, el crecimiento y la resurrección con
las características de un misterio. En Eleusis, a 20 km de Atenas, los
Misterios Eleusinianos se representaban cada año entre septiembre y octubre.
Los participantes caminaban en procesión desde
Atenas hasta Eleusis, donde eran iniciados en los ritos secretos que quizá
tenían similitudes con los ritos primitivos de la cosecha con referencias a la
muerte y la resurrección. Durante los Misterios, se representaba la historia de
Deméter y su hija Perséfone, siendo éste el mito más importante de la diosa de
la tierra.
Perséfone
era la única hija de Deméter y fue concebida con Zeus. Sin el conocimiento de
Deméter, Zeus la había prometido en matrimonio a su tío Hades, que no manejó la
situación con demasiado tacto. Mientras la joven Perséfone se encontraba en
Sicilia recogiendo flores en el bosque con sus amigas las hijas de Océano, o el
dios de los ríos Acheluos (Aquelos), según algunas fuentes convertidas en
sirenas, el dios de la inframundo apareció repentinamente en su cuadriga tirada
por caballos negros y se llevó a Perséfone. La muchacha soltó las flores y
llamó a su madre temiendo por su vida, pero nada se pudo hacer. Hades la había
raptado y se la había llevado al reino de los muertos.
Cuando
Deméter se dio cuenta de la desaparición de su hija, empezó a buscarla. Vagó
durante nueve días sin comida ni bebida buscándola. En un momento se encontró
con Hécate, que había oído los gritos de terror de Perséfone y que llevó a
Deméter hasta Helios, el dios del sol que podía ver todo lo que ocurría en la
tierra desde su carro. El dios le contó que su hija se encontraba en el mundo
de los muertos (aunque según Ovidio la noticia la dio la ninfa Aretusa).
Deméter quedó tan impresionada que llevó la sequía y la hambruna a todo el mundo y no regresó al Olimpo, quedándose vagando por el mundo en una profunda tristeza. Mientras estaba sentada cerca de un pozo en Eleusis, ya con aspecto de anciana, las hijas del rey Celeo y de la reina Metaneira se acercaron a coger agua. Se llevaron a Deméter a casa, ya que les había dicho que era una niñera a quien los ladrones le habían quitado todo. Allí pudo cuidar de Demofón, el príncipe recién nacido. Deméter decidió hacer al niño inmortal rodándole con ambrosía durante el día y poniéndole junto al fuego por la noche. Metaneira la sorprendió haciendo esto y así debió revelar su verdadera identidad. Ordenó a Celeo y a Metaneira que fundasen un santuario en su honor en Eleusis, lugar que más tarde se convirtió en el punto de representación de los Misterios Eleusinianos.
Deméter
permaneció en su nuevo templo durante un año, evitando el contacto con los
otros dioses. Mientras tanto, nada creció sobre la tierra estéril. Zeus se dio
cuenta de ello y envió a Iris para que hablase con Deméter, que sólo quería que
le devolviesen a su hija. Aunque Zeus intentó convencerla de que Hades era el
mejor esposo para ella, Deméter no cambió de postura. No se podía hacer nada
para recuperar a Perséfone y el dios mensajero Hermes tuvo que acudir en su
rescate. Hubo una complicación, pese a todo, pues de acuerdo con una antigua
profecía del destino cualquier persona que abandonase el Averno no debería
haber comido nada allí. Hades lo sabía y había obligado a Perséfone a tomar
unas semillas de granada, aunque, según Ovidio, Perséfone las tomó a solas
mientras paseaba por los jardines de Hades. Perséfone negó al principio haber
tomado nada, pero Ascafalo, hijo de una ninfa, había sido testigo de todo e
informó a los dioses.
Finalmente, Zeus decidió que Perséfone debería estar parte del año con su madre y parte del año con Hades. Cuando estuviera con su madre, el grano crecería y maduraría, y cuando estuviera con Hades, la tierra permanecería estéril. El principio del periodo de Perséfone sobre la tierra estaba asociado al otoño y duraba hasta el comienzo del verano, desde la siembra hasta la recolección. Durante el periodo que pasaba en el Averno, los meses de calor a orillas del Mediterráneo hacían que la tierra permaneciese estéril. Más tarde, quedó establecido que Perséfone estaba con Hades durante el invierno, cuando la naturaleza descansa, y con Deméter durante la primavera y el verano, cuando la naturaleza crece. Así es como este mito explica el paso de las estaciones.
Después de que Deméter hubiese encontrado a su hija de nuevo, ordenó que Eleusis, que originalmente era de Triptolemo según algunas fuentes era el mismo príncipe Demofón al que Deméter había criado extendiese la agricultura por todo el mundo. La historia de la diosa simboliza así el cambio en la civilización de una cultura de la caza a una vida agrícola no nómada.
Deméter se relaciona también con la diosa egipcia Isis, la fenicia Astarté y la mesopotámica Ishtar. Hay varias diosas con rasgos primitivos en la mitología griega, además de Deméter, que son Afrodita y en menor grado Artemisa y Atenea. La frigia Cibeles, que más tarde fue adorada en Roma como la «Gran Madre», podría pertenecer a esta lista. Hay aspectos del culto se estas diosas que han perdurado en la adoración de la virgen María.
Hecate (del griego Ἑκάτη) Titán griego de la brujería, de la hechicería y las encrucijadas.
Diosa telúrica, probablemente de origen
prehelénico. Poco precisa en sus lineamientos e historia mítica.
La figura de la diosa Hécate es a primera vista, una de las más desconcertantes del panteón griego, puesto que sus características varían notablemente desde los primeros testimonios recogidos por Hesíodo hasta su presencia en la época clásica y helenística, sobre todo en las referencias que aparecen sobre ella en los papiros mágicos. Sus atribuciones se mueven entre lo positivo y lo negativo, entre la vida y la muerte, entre la luz y las tinieblas, entre la realidad y el mundo fantasmagórico, oscilando siempre en un juego continuo de opuestos, vinculándose o asociándose con otras divinidades como Artemis, Selene, Perséfone, Hermes o Deméter.
Algunos han pensado que es una
diosa lunar y tiene gran relación con Artemis, con Selene y otras deidades
borrosas. Otros niegan la existencia de cultos lunares en Grecia. Otra
correlación indica que el nombre de Hécate, deriva de la diosa egipcia Heqit,
Heket o Hekat. Heket, era una diosa sabia con cabeza de rana que se asoció a la
creación del cosmos y de los hombres, y era compañera de Khnum, el dios con
cabeza de carnero, modelador de dioses y hombres.
En Grecia paso como una diosa
lunar, conectada con la tierra, el cielo y el submundo. Hija de dos titanes
Asteria y Perses, nieta de Coeo y Febe. Zeus la colmó de dones y prerrogativas
y le dio poder absoluto sobre la tierra y el mar. Pronto fue también diosa del más
allá. Otra tradición más antigua la nombra como Hija de la Noche (NIX). De
cualquier forma, es una diosa titánica, que no fue desposeída de sus poderes ctónicos
y fue aceptada en el Olimpo, pero por distintas leyendas griegas, acaba
viviendo en el submundo (Reino de la subconsciencia pues se le tenía demasiado temor
para que estuviera en la “conciencia”).
Hécate tiene una doble vertiente,
por un lado, es conocida como la Triple Diosa, de ahí sus “HeKateas”, estatuas
de tres cabezas que se ponían en los cruces de caminos que era donde le gustaba
presentarse con sus perros negros y hermosos. Por ello era venerada en las
encrucijadas y sitios donde se habían cometido crímenes, por el poder emocional
y pasional que contenían estos lugares. Sus estatuas están representadas con
tres cuerpos y tres cabezas y muchas veces con cuatro de una y otra parte. Las
tres caras o tres cabezas fueron explicadas más tarde como símbolo de una
triada femenina, en que aparece como Selene, reina del cielo nocturno, Artemis,
reina de la tierra y Hécate reina del abismo subterráneo.
También se le represento con
cabeza de perro, serpiente y león o yegua y con seis brazos portadores de tres
antorchas y tres símbolos sagrados, una llave por su papel de guardiana de los misterios
del submundo, una soga o látigo, esto era como símbolo del trabajo de llevar
las almas al submundo y ayudarles a renacer y una daga que más tarde se convertiría
en el athame de las brujas.
Era una deidad doméstica común para los atenienses, el hogar era uno de los espacios con el que se le vinculaba, de ahí el epíteto propylaea y su relación con las llaves, por la que recibía también el apelativo Kleidouchos (Portadora de las llaves). Sus santuarios eran ubicados en las puertas y vestíbulos de la ciudad para protegerlos de los espíritus inquietos y otorgar bendiciones y su paso seguro. Su culto y adoración fue tan extenso como sus diversos atributos, con templos y santuarios diseminados por todo el Mediterráneo. Como figura clave en la saga Perséfone, Hécate fue parte integral de los antiguos misterios eleusinos, impactando sociedades secretas y rituales ocultos hasta el día de hoy.
Su triplicidad ha definido gran
parte de la teología pagana moderna, con su postura que representa las tres
fases de la luna, Creciente, Llena y Menguante (Doncella, Madre, Arpía,
respectivamente).
En la Teogonía de Hesíodo, el
Himno a Hécate, la describe de la siguiente manera:
“Ella, al quedar embarazada, trajo al mundo a Hécate, a la que el
Cronida Zeus estimó por encima de todas y le dio como brillantes regalos
participar de la tierra y del estéril mar, pero también obtuvo parte de la
honra del estrellado cielo y es especialmente respetada por los inmortales
dioses. En efecto, ahora, cada vez que alguno de los hombres sobre la tierra
quiere atraerse el favor de los dioses, realizando hermosos sacrificios según la
costumbre, suele invocar a Hécate.
Mucha honra acompaña a aquel cuyas súplicas acepta benévola la diosa, y
le otorga, además, felicidad, puesto que tiene capacidad para ello”
Un poco más adelante, Hesíodo
describe sus atributos:
“En el juicio se sienta junto a los venerables reyes y en el ágora hace
sobresalir al que quiere; cuando para la destructora guerra se preparan los
hombres, entonces la diosa asiste a los que desea otorgar la victoria y
concederles la gloria. Asimismo, es útil cuando los hombres compiten en un
certamen, pues también la diosa les asiste y ayuda y, al vencer en fuerza y
capacidad, un hermoso premio con facilidad y alegría se lleva y sus padres da
gloria. Es capaz de asistir a los jinetes que quiere, y a los que trabajan en
el tempestuoso mar y suplican a Hécate y al retumbante Enosigeo, fácilmente
abundante botín les concede la ilustre diosa y con facilidad se lo quita,
cuando parece seguro, cuando así lo desea en su ánimo. Con la ayuda de Hermes tiene la posibilidad de
aumentar los rebaños de cabras, majadas de ovejas de espeso vellón, si así lo
quiere en su ánimo, a partir de pocos, los hace prosperar y de muchos,
disminuir”
Finalmente, Hesíodo finaliza su
discurso así:
“El Cronida la hizo criadora de los jóvenes que después de ella vieron
con sus ojos la luz de Eos que a muchos alumbra. Así desde el comienzo, es
criadora de jóvenes y estas son sus esferas de actuación”
La semblanza que obtenemos de la lectura del Himno a Hécate nos recuerda a la ideología triunfal y jerarquizada; un poder religioso-político, un poder militar y un poder vinculado con la fertilidad-fecundidad, que son precisamente las esferas de acción de Hesíodo que destaca de la diosa. Tenemos como resultado a una diosa que asiste los juicios, que atiende las suplicas de los seres humanos, que cría jóvenes, que fomenta la fecundidad de los ganados y que incluso, asiste a los combatientes en la guerra para otorgarles el agon: la gloria.
Así, entre alabanzas de Hesíodo
encontramos una sombra: la diosa puede premiar con facilidad, pero también quitar
lo otorgado, si así lo dicta su ánimo. Asoma aquí una de esas contradicciones a
las que hacíamos referencia. Es necesario seguir investigando para determinar
el motivo de este punto de inflexión, si es que hubo realmente.
En el Himno homérico a Deméter, Hécate
aparece como la única que oyó los lamentos de Perséfone al ser raptada por
Hades para ser conducida al infierno en su carro:
“Ninguno de los inmortales ni de
los hombres mortales oyó su voz, ni siquiera los olivos de hermosos frutos.
Sólo la hija de Perses, la de ingenuos sentimientos, la oyó desde su antro: Hécate,
la de brillante tocado (y asimismo el soberano Sol, el ilustre hijo de Hiperión),
cuando la muchacha invocaba a su padre, el Cronida”
Poco después, sale al paso de
Demeter, mientras buscaba desesperada a su hija, alumbrada por antorchas para
decirle que escucho los gritos de la joven, pero no vio a quien la secuestraba.
En la última referencia que encontramos en esta obra, Hécate aparece
estrechamente vinculada a Perséfone, con la que compartía “alegrías”, se la
menciona como la de “brillante tocado” y nos dice que la sobera “la precede y
la sigue”.
Vemos, por tanto, una dimensión diferente,
que no aparece explícitamente en Hesíodo, pero que va a ser una constante en
los relatos posteriores: Hécate como moradora del Hades, territorio en el que
se guía iluminándose por antorchas, es portadora de la luz en las tinieblas y
de la revelación, no en vano, es la única que, según el relato, ha sido testigo
de lo acontecido y así se lo cuenta a Deméter. Su gran amistad con Perséfone,
con la que teje estrechos lazos, nos muestra un cariz ctónico, que comienza a
vincular a Hécate con el inframundo, de donde puede salir y entrar a voluntad,
pues no deja de ser la “portadora de antorchas”.
Otras referencias tardías, son parte de los Oráculos Caldeos de los papiros mágicos, los cuales presentan a Hécate como ama y soberana del mundo, madre fecunda.
La doctrina caldea sitúa en la cima de la realidad al Padre, esencialmente incognoscible, enclaustrado en su intrínseca naturaleza, extiende desde su mismidad irrevelable la potencia o posibilidad total indistinta que puede manifestarse intelectualmente. El seno del Padre, inmóvil, silencioso, da nacimiento a un vástago de su misma naturaleza, que es el intelecto o el Nous paterno, la totalidad intelectual. Este intelecto se mira así mismo, pero también tiene capacidad activa, en este sentido es agente. El intelecto agente tiene el mundo como sujeto de producción, pero lo que despliega es un cosmos viviente como un arquetipo cósmico inmutable que, morando en la fuente de la vida total (Hécate), es puesto en movimiento por el “más allá dualmente”, que conoce y actúa externamente. La tierra es el centro geométrico del universo de siete esferas omphalos del sistema, y el sol centro orgánico o vital, su corazón. En este contexto, la figura de Hécate, el Alma del Universo o Magna Mater, es fundamental por ser intermediaria entre lo soberanamente trascendente y el cosmos, ocupa la región hipercósmica, que esta sobre el mundo. Hécate es fuente de vitalidad, como madre virginal, aunque carece de órganos generativos. De su seno proviene toda la existencia hipercósmica y cósmica, en su seno materno se concibe el fuego del hápax epékeina, que ejecuta lo que el primero contempla.
El esquema metafísico de los oráculos caldeos comienza con una deidad absolutamente trascendente llamada Padre, con quien reside el poder, un principio productivo del cual parece que procede el intelecto. Este intelecto tiene una doble función: contemplar las formas del reino puramente intelectual del Padre, y elaborar y gobernar el reino material. En esta última capacidad, el Intelecto es Demiurgo
Los oráculos plantean además una barrera entre el reino intelectual y el material, personificado como Hécate . En la capacidad de barrera, o más apropiadamente “membrana”, Hécate separa los dos ‘fuegos’, es decir, el fuego puramente intelectual del Padre, y el fuego material del cual se crea el cosmos, y media toda influencia divina sobre el reino inferior.
De Hécate se deriva el Alma del Mundo, que a su vez emana la Naturaleza, el gobernador del reino sublunar. De la Naturaleza se deriva el Destino, que es capaz de esclavizar la parte inferior del alma humana. El objetivo de la existencia es purificar el alma inferior de todo contacto con la Naturaleza y el Destino al vivir una vida de austeridad y contemplación. La salvación se logra mediante un ascenso a través de las esferas planetarias, durante las cuales el alma desecha los diversos aspectos de su alma inferior, y se convierte en puro intelecto.
De aquí surge la representación de strophalos, generalmente traducido como trompo o rueda, usado en magia Es un círculo que encierra un laberinto serpentino con tres pestañas principales, que a su vez se encuentra a alrededor de un espiral de fuego central.
Debajo del mundo de la Tríada Inteligible del Padre, la Magna Mater o Hécate, y el Intelecto, se encuentran los tres mundos descendentes Empíreo, Etéreo y Elemental. Un Segundo Intelecto Demiúrgico representa el poder divino en el Mundo Empíreo, un Tercer Intelecto representa el poder divino en el Mundo Etéreo. Y un Mundo Elemental está gobernado por Hypezokos o Flor de Fuego.
Seguimos encontrando testimonios
referidos a Hécate, pero a medida que cosechamos más información, la ambigüedad
sobre su carácter se incrementa. La diosa de los caminos aparece referida en
dos de sus obras, Argonáuticas e Himnos órficos. En la primera de ellas
explica que:
“En un principio a la fatal necesidad de antiguo Caos y a Crono, que
engendró en sus enormes surcos a Éter y al Amor, de dual naturaleza, visible,
por doquier e ilustre, famoso padre de la Noche eterna, a quien, como es
sabido, los mortales más recientes llaman Fanetes, porque fue el primero que apareció;
y la raza de la poderosa Brimo y las obras destructoras de los Hijos de la
Tierra, que, desde lo alto del cielo, destilaron la semilla funesta de la generación,
de donde surgió el primitivo linaje de mortales, que sin cesar se encuentran
sobre la tierra infinita”.
En este pasaje, Hécate aparece
como Brimo, apelativo que, también nos encontramos en las Argonáuticas de
Apolonio y se repite en el Protéptico
de Clemente de Alejandría, relacionándola con la cría de jóvenes. Se vincula
con la “semilla funesta de la generación”, que hace referencia a su relación con
la cría de jóvenes. En relación con este apelativo, Hard afirma que este apelativo
tiene su origen en el Escolio a Licurgo, en que se explica cómo Hermes trató de
raptar a Hécate y esta grito de furia hasta que el dios desistió de sus
intenciones. Con este apelativo ha sido vinculada también por Baring y Cashford
con los misterios de Eleusis.
En este otro fragmento de Argonáuticas, Porfirio (Porphyrius Tyrius) la describe con forma monstruosa:
“Con ella venia la hija del Tártaro, Hécate, de formas cambiantes, tricéfala,
prodigio funesto de ver, indestructible, de su hombro izquierdo salía un
caballo de larga crin y, a su derecha se podía contemplar una perra de mirada
furiosa; en medio, una figura de aspecto salvaje sostenía en ambas manos unas
espadas provistas de empuñadura. De un lado a otro, en torno al hoyo, se movían
en círculo Pandora y Hécate; las acompañaban apretujándose las vengadoras”
El Himno órfico a Hécate es otra
de las obras de Porfirio en la que encontramos referencias a Hécate:
“Invoco a Hécate, protectora de los caminos, en las encrucijadas, grata, celeste, terrenal, marina, de azafranado peplo, sepulcral, y que se agita delirante entre las almas de los muertos; hija de Perses, amante de la soledad, que disfruta con los ciervos, noctambula, protectora de los perros, invencible soberana que devora animales salvajes, sin ceñidor en su cintura, y con figura irresistible; que se mueve entre los toros, dueña guardiana de todo el universo; conductora, joven guerrera, nutridora de jóvenes, montaraz. En conclusión, suplico que asista la doncella a los sagrados misterios, mostrándose propicia al boyero de corazón siempre alegre”
Este himno resulta de gran relevancia
por su carácter sintético, ya que en pocas palabras resume los atributos que se
le han ido atribuyendo en diferentes fuentes.
Todo lo misterioso y fantasmático
está relacionado con ella. Es la que preside ciertas formas de magia y adivinación.
Los encantamientos mágicos y todas las apariciones y visiones agradables y
desagradables ya sean conscientes o a través de los sueños se le atribuyen a
Ella. Es protectora de los que litigan ante los tribunales, de los atletas y de
los políticos. Protectora y nodriza también de los jóvenes. Ella es
simultáneamente el final y el principio, nuestra alfa y omega de la brujería.
Hécate es misteriosa y severa. Su rostro está oculto detrás de sus antorchas, o en el lado oscuro de la luna, sin embargo, su presencia es constante. Ella es vida, muerte y renacimiento. Ella es a la vez mágica clara y oscura. Era querida en su asociación con los ritos de iniciación como el parto, y temida en su papel de Reina de las Sombras, presente en el último rito de iniciación, la muerte. Su naturaleza ha impregnado toda mi serie de una manera tan profunda e indescriptible.
La vibración que tienes de tu energía es proporcional a cómo te sientes en tu día a día y también a lo largo del tiempo.
Recuerda también en que todas las moléculas de tu cuerpo y hasta su base más fundamental: los atomos, se mueven a partir de electricidad, de tal forma que funcionan como elementos de memoria que se expanden a las demás de forma inmediata; de tal forma que si la mayor parte del tiempo vibro con emociones de amor, paz, alegría o poder personal, por decir algunas, mi vibración será alta, pero si la mayor parte del tiempo estoy en la cólera, el miedo, el victimismo o la desesperanza, entonces mi vibración será baja; y de esta forma es como se alimentarán todos los átomos de tu cuerpo.
La vibración no es algo estático, la buena noticia es que a través de nuestra intención deliberada podemos cambiarla a voluntad.
¿Qué puedo hacer para subir mi vibración?
Hay cosas que podemos hacer en el día día como una receta simple; y son tan simples como esto que pongo en listado (ojo! no son los únicos; pero son los más simples de hacer)
Subir tu vibración depende exclusivamente de ti
Tener una baja vibración no significa que uno sea peor o mejor persona ni que este más o menos evolucionado.
Significa que te sitúas en ese rango frecuencial tan bajo porque no tienes o no conoces las herramientas para vibrar de otra manera, o a lo mejor ni siquiera te has planteado que vibrar de otra manera SI es posible y que solo depende de ti.
Igual que eliges y sintonizas la cadena con la que quieres conectar en tu radio puedes elegir las emociones con las que deseas sintonizar a diario. Parte de saber que te hace vibrar alto, es un resultado de que tanto me observo y me conozco; que cosas son las que me hacen feliz y que es lo que me mueve. De forma totalmente conciente.
Haz lo que te apasione
Algo sencillo para subir tu vibración es hacer cualquier actividad que te apasione: bailar, jugar, escribir, cantar, dibujar, leer, hacer deporte, cualquiera que sea tu pasión te proporcionará bienestar y en ese momento tendrás la sensación de que estas conectado. Si tu pasión se convierte en tu trabajo, entonces es para tirar cohetes, pero si eso no sucede así, dedícale tiempo a hacer lo que te gusta.
También puedes viajar a cualquier lugar que te produzca armonía, la naturaleza es un buen lugar porque vibra en armonía y hace resonar el mismo estado en nuestro interior.
Vibrar alto tiene mucho que ver con sentirse conectado.
Y hablando de conexión, hay algo que quiero aclarar:
Siempre estamos conectados, absolutamente todo el mundo posee un interruptor de conexión en su interior, a veces lo apretamos y parece que toda funciona, lo que ocurre es que la mayoría de las veces se nos olvida que ese interruptor esta ahí y a nuestro alcance, como el interruptor de tu habitación para encender la luz.
Las herramientas más poderosas
La meditación, la respiración y la oración son las formas mas rápidas para conectarte y subir tu vibración, será por eso que casi todas las escuelas y técnicas ancestrales y modernas las incluyen en sus métodos.
meditación y vibración
La meditación es una forma rápida de subir tu vibración.
Estas herramientas que yo llamo conexiones rápidas A.D.S.L (o ahora fibra óptica) tendrían que pasar a convertirse en un modelo de vida.
La meditación: sube rápido tu vibra porque al reducir tu actividad mental se crea un espacio donde poder escucharte, vaciarte y sintonizarte. La meditación hace que conectes rápidamente con una vibración de expansión, tranquilidad, paz y te devuelve al equilibrio.
Respirar: es un paso previo para hacer una meditación profunda, sin embargo en situaciones más extremas en las que no tenemos tiempo para sentarnos a meditar, una simple respiración con consciencia puede hacer que actuemos con mas calma y lucidez ante una situación conflictiva.
En medio de una pelea, en una crisis o cuando lo vemos todo negro, respirar puede ser la única herramienta que esté a nuestro alcance, su potencia reside en que hace de puente entre cuerpo y espíritu, de ella depende la conexión y equilibrio entre nuestro mundo tangible e intangible.
Respirando, nuestras emociones y pensamientos se aquietan, se calman y se centran.
La oración o decreto
Es hacer una petición a una fuerza superior desde el corazón. Esta fuerza superior varia según las creencias de cada uno, a quien pidamos no importa, lo que si importa es pedir con toda la fe y el amor del mundo y sin apegarse a los resultados.
Cuando te comunicas con una fuerza superior también te estas comunicando contigo mismo, orar es una forma de escucharte, ordenarte y comprometerte con una vibración de esperanza, sabiendo que lo mejor para ti o los demás llegará.
Coherencia interna
Coherencia interna es dirigir tus pensamientos, palabras, emociones y acciones en una misma dirección.
Si sientes una cosa y haces otra bien distinta estás creando desconexión con tu ser interior o principal fuerte de energía.
Si quieres tener más energía y vibrar más alto no puedes olvidar la ley de la coherencia interna. A veces esto puede ser complicado porque muchas veces nos hacemos pequeñas traiciones por el que dirán, por agradar a los demás, por pena, por culpa, por lastima y otro tipo de emociones castrantes.
Con esto no quiero decir que no haya que ayudar a los demás, muy al contrario ayudar a los demás es otra forma fenomenal de subir tu vibración, pero !ojo! siempre que nos lo hayan pedido explicita o implícitamente porque es fundamental respetar el libre albedrío de la otra persona.
Ayudar esta bien siempre y cuando no te traiciones a ti mismo o te desgastes energéticamente, eso no sería ayudar, seria forzarte y no tendría ningún sentido porque estas ayudando a otra persona para perjudicarte tú y eso no le interesa al Universo que se rige por parámetros de equilibrio.
La regla para acertar es buscar siempre que puedas el ++ (yo gano, tú ganas)
Cuida tu salud
Para vibrar más alto es requisito básico que tus cimientos estén en condiciones.
Lo primero que puedes hacer es mimar y cuidar tu cuerpo físico, salir de la mente y ponerte en contacto con el cuerpo sube automáticamente tu vibración, prestarle atención al cuerpo hace que vuelvas a estar centrado y solido, fuera de la volatilidad de tus pensamientos y emociones.
Optar por comer más sano sin llegar a extremos y hacer ejercicio acorde a tus gustos y necesidades, prepara tu casa para subir de frecuencia.
Cuidar tu campo energético también es muy importante.
Cuando te sientas muy cargado, cansado o saturado te recomiendo el siguiente ejercicio para movilizar la energía de tu cuerpo astral o emocional: coloca tus manos a la altura de tu frente y como a unos 10 cm separadas del cuerpo, ves bajando lentamente tus manos hasta llegar a los pies y desde ahí vuelves a subir de la misma forma, repitelo cuatro veces: bajar, subir, bajar y por último volver a subir. Si lo haces con conciencia moverás tu cuerpo energético y te sentirás más ligero.
Si puedes hacerlo todos los días mucho mejor.
Desenchúfate de las malas noticias
Apaga las malas noticias y mejorarás tu vibración.
Donde está tu atención, esta tu energía y por lo tanto, tu poder. Donde están tus ojos, están tus ojos que miran.
Si prestas atención a noticias de crisis, terremotos, suicidios o malestar en general, estarás vibrando con esas emociones sin apenas ser consciente de ello. Tú decides lo que quieres observar, eso no significa que estés negando la realidad de muchos, si no que en tus manos está la decisión de elegir el foco de la realidad en el que deliberadamente te quieres centrar, tu vibración depende de ello.
La televisión te hace estar en modo pasivo y las ondas cerebrales que emites cuando la ves son las mismas que cuando estas en estado de hipnosis, por eso es muy importante que decidas que te interesa ver y optar por una actitud de poca permeabilidad ante lo que la pantalla tiene para ofrecerte, sobre todo cuando se trata de cosas que te hacen sentir mal. En caso de duda, coge el mando y apaga la televisión, así de fácil.
Descubre el inmenso poder de tus emociones
Emociones y pensamientos van de la mano, buscando pensamientos de alivio modulo mis emociones para reconectarme de nuevo conmigo mismo.
Para vibrar más alto hay que modular nuestras emociones para que empiecen a resonar con la frecuencia del bienestar que es la que tu deseas y no con la del mal-estar que es la que te imponen.
Este es un proceso paulatino que requiere un firme compromiso sostenido en el tiempo de querer estar mejor.
Vibrar más alto en un momento determinado puede ser fácil, una buena noticia, un excelente encuentro con amigos, un masaje o un viaje son herramientas a las que puedes recurrir para sentirte mejor. Lo que puede resultar un pelín más complicado es sostener una vibración alta la mayor parte del tiempo.
Elegir la vibración en la que deseas resonar es un acto de creación deliberada en la que tu optas por sentirte X en vez de Y ante determinadas circunstancias, pero mejor veamos un ejemplo:
Una mala noticia como «me acaban de despedir del trabajo» baja la vibración a cualquiera y eso es normal, pero uno puede optar por mantenerse en esa vibración e incluso ir peor con pensamientos como «es lo peor que me puede ocurrir» o escoger otra dirección en la que paulatinamente vayas subiendo en la escala vibracional buscando pensamientos que generen alivio emocional ante esa circunstancia como por ejemplo «es un momento para indagar en mi futuro profesional».
Estar en positivo depende exclusivamente de ti.
Si aprendes a SOLTAR DE FORMA DELIBERADA Y REITERADA tus emociones negativas podrás mantenerte en una vibración de bienestar la mayor parte del tiempo y por ende te sentirás conectado, con energía y poderoso.
Puede que en tu caso conozcas otras formas diferentes para subir tu vibración…
Lo que significa exactamente “Elevar Nuestra Frecuencia Vibratoria” y el por qué es importante hacerlo
La expresión “elevar nuestra frecuencia vibratoria” se utiliza mucho en el mundo de la espiritualidad y el crecimiento personal, ¿verdad? Y todos aceptamos que es algo positivo. La usamos como sinónimo de “avanzar”, “crecer” y “mejorar”.
Pero por muy habitual que sea esta expresión, creo que es importante plantearse qué significa exactamente. ¿Por qué elevar nuestra frecuencia vibratoria es positivo? ¿Por qué es mejor tener una frecuencia alta que una frecuencia baja? ¿Y qué implicaciones tiene?
Es un tema importante y profundo, y creo que vale la pena hablar de él con en detalle. Nos ayudará a entender mejor el mundo donde vivimos y a integrarnos mejor en él.
¿Qué Es la Frecuencia de Vibración?
Para empezar, el primer paso es entender bien la definición de frecuencia de vibración. Este concepto está asociado principalmente a las ondas, e indica la cantidad de ciclos que produce una onda en una determinada unidad de tiempo (normalmente, un segundo).
Dicho de forma coloquial, la frecuencia de una onda es la cantidad de veces que “sube y baja” en un segundo. Cuanto mayor es la frecuencia, más rápido vibra la onda; y cuanto menor es la frecuencia, más lenta es la vibración.
La siguiente imagen muestra dos ondas diferentes. En un mismo espacio, la segunda onda “sube y baja” más veces, y esto significa que su frecuencia vibratoria es mayor.
¿Qué Tiene que Ver la Frecuencia de Vibración de las Ondas con Nosotros?
De entrada, puede parecer que la frecuencia de vibración de las ondas no tiene mucho que ver con nosotros, pero en realidad sí. Porque resulta que nosotros somos ondas. De hecho, todo el universo son ondas. Y esto es la base de la que partimos, es una de la base de la magia y de las Leyes Herméticas; si, aún cuando esto es uno de los descubrimientos (comprobables por la ciencia) en este siglo.
El universo donde vivimos está formado por partículas diminutas llamadas quarks y electrones, y estas partículas se comportan como ondas. A un nivel profundo, pues, somos ondas. Y como todas las ondas, tenemos una frecuencia de vibración. Cada uno la suya… (Más o menos).
El Primer Motivo para Elevar Nuestra Frecuencia Vibratoria
Una vez que tenemos claro el concepto de “frecuencia de vibración”, y también que todo el universo son ondas que están vibrando, ya podemos plantearnos por qué es positivo que la frecuencia vibratoria aumente.
El primer motivo es que cuanto mayor es la frecuencia vibratoria del universo, mayor es su diversidad y riqueza. Cuanto mayor es la vibración del universo, más vida hay. Para verlo de forma gráfica, podemos volver a mirar la imagen anterior de las dos ondas. Fíjate en los picos que tiene cada onda (cada pico está marcado con una flecha roja):
Luego imagínate que cada pico es una forma concreta del universo: un pico puede ser un árbol, otro pico puede ser una persona, otro puede ser una camiseta, etc. Es decir, imagínate que el universo es una gran onda que está vibrando, y que cada oscilación de esta onda genera una forma distinta (es una comparación un poco simplificada, pero no dista mucho de la realidad).
La pregunta es: ¿en qué caso habría más cosas, con la onda de frecuencia baja o con la de frecuencia alta? La respuesta es sencilla, ¿verdad? Cuanto mayor es la frecuencia de vibración, más cosas hay.
Así pues, cuanto mayor es la vibración del universo, mayor es su diversidad y creatividad. Esto también es válido a nivel individual. Cuanto mayor es tu vibración interna, más rica y creativa es tu vida.
El Segundo Motivo para Elevar Nuestra Frecuencia Vibratoria
Aparte del hecho de aumentar la diversidad y la riqueza de la vida, elevar nuestra frecuencia vibratoria también tiene otro aspecto positivo: al aumentar nuestra frecuencia interna nos hacemos más sensibles a nuestro entorno. Somos capaces de percibir mejor la realidad.
Esto se debe a una propiedad muy conocida de las ondas: resulta que cuando una onda se encuentra con un objeto en su camino, solo lo percibe si el tamaño de dicho objeto es mayor que la distancia entre dos picos de la onda (esta distancia se suele llamar “longitud de onda”). Esto significa que cuanto menor es la longitud de onda de una onda, más capacidad tiene de percibir objetos pequeños. Tiene más capacidad de percibir su entorno con más detalle.
La siguiente figura muestra la longitud de onda de las dos ondas que hemos visto en los ejemplos anteriores. En esta figura se ve que las ondas de frecuencia mayor tienen una longitud de onda menor. Por esta razón, las ondas de frecuencias altas tienen más sensibilidad. Pueden percibir objetos más pequeños.
En el caso de una ola de mar, por ejemplo, la longitud de onda es la distancia entre las crestas de dos olas consecutivas. Si introducimos en el mar un objeto pequeño en comparación con esta distancia (un palo por ejemplo), la ola no lo notará. No se dará cuenta de que hay un palo en su camino, porque es demasiado pequeño para ella.
En cambio, si la ola vibrara mucho más rápido, de manera que las crestas de las olas estuvieran muy juntas, entonces sí podría percibir el palo. Se produciría una perturbación en la ola, y notaría que hay algo en su camino.
De forma general, para un mismo objeto de un tamaño determinado, una onda de frecuencia alta podrá detectarlo mejor que una onda de frecuencia baja. En la imagen de la siguiente figura, la primera onda (la de la frecuencia baja) no “percibirá” el objeto en su camino, porque es demasiado pequeño para ella, pero la segunda sí.
Este es el motivo por el cual hay muchos aspectos de la vida que aún no somos capaces de ver: nuestra frecuencia vibratoria aún es un poco baja. Hay muchos aspectos del universo que son muy sutiles, y con la frecuencia que tenemos actualmente no los podemos percibir.
Pero nuestra frecuencia está aumentando a gran velocidad en los últimos años, y es importante que lo siga haciendo. Así nos hacemos más sensibles al mundo que nos rodea y lo percibimos con más claridad.
Y también contribuimos a hacer un universo cada vez más rico y lleno de color.
Que, de hecho, es lo que hemos venido a hacer aquí.
Este pequeño tratado de Botánica oculta, es decir, el que se dedica al estudio de plantas mágicas, se basa en las teorías del gran Paracelso, el que fuera famoso alquimista y célebre médico revolucionario.
Paracelso
Nacimiento, infancia. Su primer maestro. Su iniciación. Viajes. El abad Tritemio le enseñó la Magia y la Ciencia Hermética. Paracelso médico y alquimista. Sus obras maestras. La transmutación de los metales. Su teoría de los Tres Principios.: Azufre, Mercurio, Sal. Paracelso místico. Muerte de Paracelso
Uno de los principios de Paracelso fue: «Únicamente un hombre virtuoso puede ser buen médico»; para él, la medicina tenía cuatro pilares:
astronomía
ciencias naturales
química
el amor
A pesar de que se ganó bastantes enemigos y obtuvo fama de mago, contribuyó en gran manera a que la medicina siguiera un camino más científico y se alejase de las teorías de los escolásticos.
También aportó datos alquímicos. A Paracelso se le atribuye la idea de que los cuatro elementos (tierra, fuego, aire y agua) pertenecían a criaturas fantásticas que existían antes del mundo. Así pues, la tierra pertenecería a los gnomos, el agua a las nereidas (ninfas acuáticas), el aire a los silfos (espíritus del viento) y el fuego a las salamandras (hadas de fuego).
Igualmente, Paracelso aceptó los temperamentos galénicos y los asoció a los cuatro sabores fundamentales. Esta asociación tuvo tal difusión en su época que aún hoy en día, en lenguaje coloquial, nos referimos a un carácter dulce (tranquilo, flemático), amargo (colérico), salado (sanguíneo, dicharachero) y el carácter ácido pertenecería al temperamento melancólico.
Botánica oculta
Primera parte
El reino vegetal. Botanogenia. Teorías herméticas Advenimiento del Reino Vegetal. Constitución estática de la planta. Fisiología Vegetal: Anatomía. Crecimiento del grano. Crecimiento de la raíz. Crecimiento del tallo. El Árbol. Producción de los nudos. Producción de las ramas. La Flor. El Paraíso de la Planta. El Grano. El Fruto. Madurez. Resumen. El Od dela Planta. El alma de la Planta. Plantas y Animales. Conclusión general. Fisiognosis Vegetal. Clave binaria. Clasificación de los elementos…
Nombres: Arianrhod, la dama de la rueda, la dama de la rueda de plata
¿Quién es Arianrhod?
Arianrhod es una hermosa doncella hija de la diosa Dôn, tiene por hermanos a Gwydion, Gilfaethwy, Anaethon y Gofannon.
Tuvo dos hijos Dylan y Lleu, pero en algunos escritos se menciona que tuvo dos hijos más con Liaws mab Nwyfre y que su padre era Beli Mawr.
Arianrhod significa “rueda”, “rueda de plata”, y en galés moderno puede significar, además de rueda, “círculo”.
En galés, la constelación que conocemos como Corona Borealis o Corona del Norte se llama Caer Arianrhod que se traduce como “la fortaleza o castillo de Arianrhod”. El Caer Arianrhod, según un poema de Taliesin, puede ser entendido como un lugar de muerte y renacimiento.
Por otro lado, se dice que el Caer Arianrhod estaba en la costa noreste de Gales y de hecho existe una roca conocida así, que sólo podemos ver cuando la marea esta baja.
Atributos y roles
“Rueda” puede hacer referencia a la rueda del destino, a la rueda de la fortuna, a la rueda del renacimiento (karma), etc., conceptos posibles de transformación.
“Rueda de plata” sugiere una asociación con la luna y también se establece una relación con la diosa de las estrellas.
En el mito cuando Lleu visita la fortaleza terrenal de su madre Arianrhod, Caer Arianrhod, es donde se decreta su destino por tanto es uno de los roles de esta diosa: ayudarnos a hilar nuestro destino. Ella es quién nos recuerda que venimos a este mundo con una diversidad de capacidades y habilidades que nos posibilitan para el bien o el mal, y que de acuerdo con las circunstancias que vivimos desde nuestra infancia nos formamos de una determinada manera. Con nuestras decisiones y acciones determinamos el rumbo de nuestra vida.
Unos de los atributos de Arianrhod es la de ser iniciadora, ella te pone a prueba y te coloca en las circunstancias adecuadas para que sean posibles los cambios o las transformaciones en tu vida: la ley de causa y efecto.
Origen mítico
Math, hijo de Mathonwy, señor de Gwynedd al norte de Gales; quién es un poderoso hechicero en tiempos de paz debe reposar sus pies sobre el regazo de una doncella. La doncella en turno era Goewin, hija de Pebin, ella era la más bella del país y de quién su sobrino Gilfaethwy, hijo de Dôn, se había enamorado perdidamente y quería poseerla. Gwydion al ver sufrir a su hermano se ofrece a ayudarlo, planeando la manera de hacer que su tío Math se separará de la doncella para que su hermano pueda poseerla.
Dado que la única forma de hacer que su tío Math se aparte de la joven Goewin era que éste se fuese a la guerra, Gwydion engaña a Pryderi, hijo de Rhiannon, para quitarle a los cerdos que Arawn, rey de Annwfn, le había regalado y que Pryderi había jurado a su pueblo no venderlos ni darlos hasta que su número se hubiera duplicado. Prydery se da cuenta del engaño y sale en busca de los estafadores.
Por su parte Math cuando tuvo noticia del levantamiento se fue a luchar contra Pryderi, dejando sola a su doncella. Aquella noche Gwydion y Gilfaethwy volvieron a Caer Dathyl (fortaleza galesa en Arfon, en el norte de Gwynedd), y Gilfaethwy violó a Goewin en el lecho de Math.
Cuando Math vuelve victorioso de la guerra, descubriendo el engaño y agravio hacia la joven Goewin, castiga a sus sobrinos convirtiéndolos en animales (una hembra y un macho que irían alternando cada año) para que copularan y procrearan. Pasaron tres años y procrearon tres hijos a los que Math convierte a una forma humana y los bautiza.
Luego que ha perdonado a sus sobrinos les pide propongan a una doncella en la que pueda reposar sus pies, éstos proponen a su hermana Arianrhod quién es llevada ante su tío Math.
Cuando el señor de Gwynedd le pregunta a Arianrhod si es doncella, esta molesta por no querer pasar sus días sosteniendo los pies de su tío en el regazo, no le responde claramente si es o no doncella así que Math le pone una prueba haciéndola pasar encima de una vara encantada y mientras lo está haciendo da a luz a un niño de cabellos dorados y robusto. Después de parir, Arianrhod se encamina hacia la puerta, pero antes de llegar en ese mismo momento arroja otra “cosa pequeña” que brillaba; y antes de que nadie pudiera darse cuenta del segundo alumbramiento, Gwydion lo toma, lo envuelve y esconde en el fondo de un cofre, al pie de su lecho. Al primer niño Math lo bautiza con el nombre de Dylan, “Hijo de la ola”.
Se cuenta que una mañana, un ruido proveniente del cofre despierta a Gwydion y que abrirlo se encuentro con un bebe. El pequeño crecía más rápido que los demás niños y cuando tenía cuatro años lo llevo a la fortaleza de Arianrhod para que conociera a su madre.
Aranrhod se enojo mucho porque Gwydion le oculto la existencia del hijo que procrearon los dos, pero además porque le avergonzaba que supieran de su existencia y del incesto que habían cometido. Él niño aún no tenía nombre y Arianrhod le amenaza diciendo que “nunca tendría un nombre hasta que ella se lo diera”. Gwydion, por su parte, usando la magia hace que se disfracen de zapateros. Cuando Arianrhod solicita que le hagan unos zapatos a su medida, mientras Gwydion le mide el pie un pájaro pequeño desciende y el niño súbitamente le lanza un punzón que le deja una herida en la pata, Arianrhod exclama ¡Lleu llaw gyffes! Que se traduce como ¡Un chico brillante con hábil mano! Y así el niño obtuvo un nombre.
Arianrhod, molesta por el engaño, ahora lo amenaza diciendo que LLeu “nunca portaría armas hasta que ella misma lo armara”. Pasaron los años hasta que llegó el momento en que Lleu, por su posición y edad debía portar armas así que su padre, Gwydion, lo hace pasar por bardo y de nuevo usando magia, hace que una gran flota de barcos se ancle cerca de la costa para desembarcar guerreros. Arianrhod, pide ayuda a los bardos para defender el castillo, pero como no tenían armas ésta tuvo que armarlos. Una vez que Llew consiguió sus armas por parte de su madre, Gwydion, levanto el hechizo y Arianrhod juro que el muchacho “nunca encontraría esposa entre la gente sobre la Tierra”.
Gwydion esta vez acude a su tío Math, juntos reúnen diferentes flores y con su magia forman a la doncella más bella y perfecta del mundo. La bautizaron según los ritos de entonces, la llamaron Blodeuedd (significa flores) y la casaron con Lleu Llaw Gyffes. *
En algunos fragmentos de poesía galesa sugieren otras versiones, una de las cuales Arianrhod se convierte en la doncella en cuyo regazo descansan los pies de Math; en otros se dice que la diosa tuvo dos hijos más con Lliaws.
* Cuarta Rama del Mabinogi
Honrando a la diosa
A la diosa se le puede honrar en luna llena pero también cuando sólo las estrellas brillan en el cielo, realizando danzas en circulo o en espiral.
Los Sabbat que se le pueden dedicar son Yule porque de ella nace un niño de luz, Ostara porque ella preside el cambio de la infancia a la juventud de Lleu y metafóricamente en este Sabbat al sol le ocurre lo mismo.
Puedes invocar a la diosa cuando necesites, quieras o debas propiciar un cambio (en nosotros mismos, en nuestros hijos, etc.), siempre pensando en que puede darte lecciones duras pero que serán siempre por el propio bien incluso sino podemos ver una buena razón para ello.
El color de la diosa es el Plata, su símbolo es cualquier figura que represente un movimiento circular o en espiral. Para conectar con la diosa y pedir su asistencia una forma es meditar con alguno de sus símbolos pensando en lo que le quieres pedir, mirar la Luna y las estrellas, salir al aire libre, haz o deshazte de aquello que has postergado o evadido porque ella como una madre te obligará a hacerlo por tu propio bien, para encaminar el rumbo de tu vida.
En griego antiguo Θώθ thṓth en egipcio Dyehuty nomo XV del Bajo Egipto Dios local, es dios de la sabiduría, la escritura y la música, así como los conjuros y el dominio de sueños, es tiempo, hechizos mágicos, símbolo de la Luna, contador de estrellas, medidor de la tierra, Señor de textos sagrados, de las leyes. Escriba de los dioses y poseedor del conocimiento divino. Mensajero de los Dioses y aseguraba el cumplimiento de sus voluntades
Su origen viene del delta del Rio Nilo pues tenía su centro en Hermopolis. Está representado por cuerpo humano con cabeza de ibis o papión, una pluma y la tablilla de escritura celestial para anotar los pensamientos, palabras y actos de los hombres y pesarlos en su balanza, lleva el Ank en su mano izquierda y un báculo en su mano derecha.
Esta considerado el dios de la sabiduría que exhorta al soberano a actuar o a tomar una decisión y tenía autoridad sobre todos los dioses, por su capacidad de dirigir a los demás, sin importar cual sea su rango. También se le considera como inventor de la escritura de las palabras y del lenguaje articulado, del juego de senet, de los escribas porque transcribe las decisiones de los soberanos convirtiéndolas en ordenanzas, vigila la distribución equitativa de los impuestos, la legitimidad de los títulos de propiedad de las artes y de las ciencias.
Dios Lunar medidor del tiempo puesto por Ra en el cielo para dejar una luz tras su retirada sus diferentes fases ofrecen al hombre una medida inmediata del tiempo por lo que Thot era el que media el tiempo de los cielos estableciendo el primer calendario y por eso el primer mes lleva su nombre. Fue el que consiguió los cinco días epagómenos que permitieron el nacimiento de Osiris, Seth, Horus, Isis y Neftis. El calendario lunar es que se empleaba para marcar los acontecimientos religiosos.
En Menfis se le considera como la Ptah cuya misión es propagar la vida a través del mundo, su poder sobre las palabras le hacía estar al corriente de las fórmulas mágicas y enseñaba las fórmulas capaces de liberar del mal a los que quería conservar con vida. Con su palabra ayudó a revivir al desmembrado Osiris;, no faltándole duplicidad y mala fe; puede llegar al engaño y la falsificación; él se asegura de repartir las ofrendas entre los suyos, manipula el curso de los astros y roba a los dioses una parte de lo que les corresponde. Según el Canon Real de Turín sucedió a Horus cuando este abandonó su reinado.
Desempeñaba el oficio de escribano sagrado ya que documenta los hechos en la sala de las dos verdades. Es el registrador y el juez, hizo de juez en la disputa entre Horus y Seth, curando luego las heridas que se habían infligido mutuamente, por lo que lleva el epíteto de “El que separa a los combatientes”; fue por curar con su saliva el ojo dañado de Horus, identificado con la luna, por lo que recibió el control sobre este satélite; fue también quien repuso los genitales a Seth. En la síntesis osiriaca es un fiel partidario de Horus e Isis, ayudando a ésta en el embarazo, nacimiento y posterior cuidado de su hijo.
En el ejercicio de la justicia asistía el pesaje de las almas en una balanza anotaba el resultado del pesaje del corazón en la balanza del juicio y enumeraba los cargos ante los jueces.
Considerado el arquitecto que conocía bien los trazados y trayectorias de todas las cosas, señor de los inventores y de la sabiduría. Estaba relacionado con la música inventor de la lira.
Según el papiro Chester Beatty, nació del cráneo de Seth. En un texto de Esna nació del corazón del creador en un momento de amargura. Se le atribuyó como hermana y compañera la diosa Seshat, identificada con Nehemetauey, en Hermopolis Magna, y a Nehemetauey en Bahu, capital del nomo XV del Bajo Egipto. Recibió varios nombres “Regular de las crecidas aguas”, el “Toro de las Estrellas” “Aton de plata”, “Sol de la Noche”, “Señor del Tiempo”
En Hermopolis se le representaba en forma de babuino, tomada de Hedy-ur, o generalmente de ibis, o con cabeza de estos animales y con la luna creciente y el disco sobre su cabeza; en las manos llevaba los instrumentos de escriba.
En Egipto era conocido como Dyehuty o Semsu, el grande e incluso el “dos veces grande” y los griegos lo identificaron con Hermes, añadiéndole el apelativo de Trimegisto (“Tres veces muy grande”).
El tarot o mejor conocido como “el libro de Thot fue en sus inicios el libro más sagrado de los antiguos egipcios, cuyo origen se cree que fue hecho en hojas de oro y dictado por el dios Thot quién se encargaba de la medida del tiempo y de predecir el futuro.
A esto se le añade la invención de los números, los jeroglíficos o la escritura en grabados, pues este al parecer se había ganado todo el respeto del pueblo y los faraones. Por esto lo consideraban como el dios capaz de manejar la vida y sobretodo el destino de todos.
“Yo soy Thot, el bienamado de Ra. Mis manos son puras y mi letra es perfecta. Odio el mal y detesto la iniquidad, y establezco por escrito la justicia divina. Yo soy el pincel con el cual el dios del universo escribe. Soy el amo de la rectitud y la lealtad, el señor de la verdad y de la justicia. Yo aniquilo la mentira y declaro la verdad ante Ra, y mis palabras tienen poder en los dos mundos. Al que vence victorioso yo lo humillo, y al débil escarnecido yo lo levanto. Yo hago llegar hasta Osiris, el Ser Bueno, yo hago penetrar a Ra en el seno de los misterios sagrados, donde los espíritus vuelven a la vida y el alma del amenti. Yo corono con el éxito todo lo que Ra emprende. Observa, yo vengo hasta ti, yo soy Thot. Yo apaciguo a Horus, yo domo a los espíritus rojos y a los demonios de la Revuelta. Yo llevo las ofrendas de los espíritus santificados. Yo abro los caminos hacia el bien. Gloria a Ra y Osiris, el Eterno y el Infinito”
En América Central el Libro de San Cipriano se volvió un grimorio muy buscado, teniendo una variedad de ediciones atribuidas a él, cada cual llena de secretos de hechicería que son empleados en magia negra. A menudo es peticionado por curanderos y curanderas intentando romper maldiciones de brujas o llamado para dominar espíritus rebeldes. También figura prominentemente en el culto de la Santísima Muerte, donde es reputado como uno de los pocos santos con el poder de templar su influencia a través del uso del amparo.
Su libro más famoso es un Grimorio titulado Libro de San Cipriano, que lleva por subtítulo “El Tesoro del Hechicero”, el cual contiene oraciones, hechizos, jerarquías infernales y sellos demoníacos. Es ampliamente conocido en el mundo de habla hispana y portuguesa. Se dice que fue escrito en antiguos pergaminos hebreos entregados por demonios al monje alemán Tomás Sufurino.
San Cipriano de Antioquia
Muy a menudo confundido con San Cipriano de Cartago que en latin era Thascuys Caecilius Cyprianus nació a principio del siglo III en Africa del Norte, quizás en Cartago y murió el 14 de septiembre del 258, decapitado en Africa por afirmar y defender la fe cristiana. Fue clérigo y escritor romano y obispo de Cártago del 249 al 258, también es considerado un santo y un mártir de la Iglesia católica del Cristianismo primitivo de ascendencia bereber, muchas de cuyas obras en latín se han conservado el recibió una educación clásica. Poco después de convertirse al cristianismo, se convirtió en obispo en 249. Una figura controvertida en vida, sus fuertes habilidades pastorales, su firme conducta durante la herejía noviciana y el brote de la plaga, y eventual martirio en Cártago reivindicaron su reputación y demostraron su santidad a los ojos de la Iglesia. Su hábil retórica latina le llevó a ser considerado como el escritor latino más destacado de la Cristiandad occidental hasta Jerónimo y Agustín de Hipona. La peste cipriana recibe su nombre de él, debido a su descripción de ella.
San Cipriano de Antioquia de Pisidia menor conocido como Cipriano el Nigromante. Fue el santo de los Necromantes, magos, brujos, hechiceros, porque está rodeado de misterio, fue uno de los menos conocidos, por su origen pagano, vivió durante el siglo III.
Fue consagrado al nacer a la diosa Afrodita y de ahí su nombre griego Kiprian de la isla de Chipre perteneciente a una larga tradición de magos y sacerdotes paganos. Su padre quería que fuera sacerdote del templo de Júpiter por lo que le dió la mejor educación, en su juventud pudo haber sido iniciado en los misterios de Mitra, Orfeo, Isis y Eleusinos. Se encamino por la teúrgia (magia benéfica griega) pero se desvió hacia la goetia (rama obscura y tenebrosa). Viajo por Caldea, Alejandria, Menfis y Salamanca para concluir sus estudios.
Cuando Cipriano regreso a su ciudad natal trabajo como un poderoso brujo y hechicero reconocido por sus pociones y por dominar a los seres infernales se dice que descubrió la forma de comunicarse con el mismo diablo o Satanás, haciendo poderos hechizos y pócimas. También tenía mucho conocimiento de la magia negra, prestaba sus servicios a quien tuviera mucho dinero para pagarle. Se retiro a una cueva donde hacia sus rituales obscuros, donde también realizó sus manuscritos que formarían su Grimorio, mejor conocido como Libro de San Cipriano
Cuenta la leyenda que un día, Agladio solicito sus servicios pues había conocido a una mujer muy hermosa y virgen llamada Justina hija de Edesio y Cleodonia, y estaba muy enamorado de ella pero, Justina era cristiana muy devota. Y le pidió a Cipriano el Nigromante un hechizo para que se enamorara de él, sin embargo, Cipriano el Nigromante no pudo doblegar la voluntad de Justina. Ella tenía una gran fuerza que no podía vencer, Cipriano mismo se enamoro de ella y la quería para el.
Cansado de tantos hechizos, invocó a los demonios y les preguntó por qué no podía doblegar a Justina. De mala gana, Lucifer le dijo: “Que la razón era la fe de Justina en Jesucristo, Dios de los cristianos, él la protege y contra él nada puedo hacer”. Cipriano, decepcionado de Satanás le respondió: “Si Jesucristo es más poderoso que tú… prefiero servirle a él”, desde entonces se dedicó completamente al estudio de las escrituras y al conocimiento de Cristo.
Luego de saber la causa de su fracaso, Justina lo acogió con dulzura y lo puso bajo la tutela del obispo Eusebio. En poco tiempo, Cipriano llegó a ser diácono sacerdote y finalmente el Obispo de Antioquía. El joven Agladio también se convirtió al cristianismo, donó todos sus bienes a los pobres y llevó desde entonces una vida de castidad y humildad.
San Cipriano fue apresado junto a Justina y conducidos a Capadocia donde se negaron a renunciar a su fe, afirmando que el único dios verdadero era el dios de los Cristianos. El juez los condenó entonces a ser azotados primero y despellejados después; luego, un sacerdote del dios Marte, llamado Atanasio, convenció al juez de que los hiciera arrojar a una marmita con agua hirviendo. Sin embargo, según la leyenda, en esa ocasión no sufrieron quemaduras debido a un milagro de Dios. Finalmente, el juez decidió enviarlos a Nicomedia para que fuera el mismo emperador quien decidiera su suerte.
En el año 304 Diocleciano ordenó que Cipriano y Justina fueran decapitados a orillas del río Galo. En el momento de la ejecución, un cristiano llamado Teoctiso corrió a abrazar a Cipriano, por lo que fue ejecutado también. Los cuerpos fueron custodiados por soldados romanos para evitar que los cristianos se los llevasen. Sin embargo, pasados seis días, un grupo de cristianos lograron llevarse los huesos y trasladarlos hasta Roma, en donde fueron puestos al cuidado de una dama cristiana llamada Rufina. Años después, los restos fueron llevados a la iglesia de San Juan de Letrán.
La más prominente de las leyendas referidas a San Cipriano indicaba que aunque su conversión fue auténtica, no renunció a sus modos de hechicero y continuó practicando como necromante desde dentro de la iglesia, usando su arte a beneficio de su gente. Se rumora incluso que debido a su íntimo conocimiento de los espíritus fue el autor de varias oraciones de exorcismos registradas en el Libro de Oraciones Sacerdotal y algunos eran libros de magia popular, algunas oraciones e instrucciones para sacerdotes sobre cómo lidiar con demonios, espíritus y otros, contenían ritos oscuros de naturaleza macabra.
En todas las leyendas San Cipriano permanece como un vínculo único entre las prácticas de la Iglesia y las prácticas de lo Oculto. Más importante, San Cipriano demuestra el elemento paradójico de la Cristiandad popular que abraza las artes mágicas.
Sus leyendas cobraron vida propia mientras empezaron a emerger libros atribuidos a su autoría. En los países nórdicos surgieron los Ciprianus, un texto de magia popular escandinava que se volvió integral a la Trolldom y las prácticas mágicas nórdicas. En España y Portugal, el Libro de San Cipriano se volvió un elemento esencial en la biblioteca de la bruja y el hechicero. En América Central y Sudamérica San Cipriano floreció plenamente como el santo de los hechiceros y los practicantes espirituales y como tal fue figura prominentemente en obras que giran en torno a romper maldiciones, controlar espíritus y demás actos de maestría esotérica.